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Vigilante asesinado en Santander era investigado por un delito de abuso sexual

A medida que pasan las horas se conocen nuevos detalles del asesinato de un vigilante que fue hallado amarrado y ahogado en un tanque de agua en San Gil.

Las causas del asesinato de Fredy Robinson López, un guarda de seguridad de 43 años de edad, son materia de investigación por parte de las autoridades. No le robaron sus pertenencias y al parecer no lo hirieron con armas blancas ni de fuego.

Lo que se conoce de este macabro homicidio fue que Fredy custodiaba las obras de las pantallas de contención que se construyen en la carrera primera de San Gil. Anoche sobre las 11 hablaba con su esposa por celular y es la última conversación que se le conoce en vida.

Después su compañera sentimental le volvió a marcar y ya no contestó. Ella le avisó a sus compañeros y uno de ellos inició la búsqueda en la obra encontrando el cuerpo sin vida del guarda de seguridad.

Tenía un golpe en la cabeza, le amarraron los pies y las manos y lo sumergieron en un tanque de agua. Al parecer, según la versión de su compañero, los delincuentes abrieron una llave para que se llenara el recipiente.

El vigilante no tenía arma de dotación para defensa personal. La Sijin de la Policía de San Gil adelanta las investigaciones pertinentes. Se descarta un robo porque se le encontraron sus pertenencias.

Asimismo, se pudo establecer que Fredy tiene una anotación en el Sistema de Información de la Fiscalía por el delito de abuso sexual con menor de 14 años.

De la víctima además se conoció que era casado y tenía una hija. Sus familiares piden justicia.

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