Las confrontaciones por el control del patio 9 en la Cárcel de Mediana y Máxima Seguridad de Palogordo en Girón, no cesan.
Así lo reveló Hernando Mantilla Medina, defensor de los Derechos Carcelarios en Santander. Confirmó que un interno conocido con el alias de ‘Karen’ habría resultado herido ayer en la mañana en una nueva riña.
“Si el problema es el poder eso seguirá, a veces terminan con muchos muertos. Es absurdo, porque se supone que el control lo debe tener el Inpec”, manifestó Mantilla.
Se desconoce el estado de salud del recluso, a quien habrían llevado de urgencia al Hospital Universitario de Santander, HUS. Con este serían 10 los heridos y un fallecido en menos de una semana dentro del centro penitenciario.
“Ellos estaban de alguna manera aislados por lo que había pasado, pero el problema continúa y no hay declaraciones oficiales por parte de la cárcel.
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La teoría es que después del muerto todo queda en silencio, porque se tiene que hacer una investigación, eso queda en manos de la Policía Judicial del mismo Inpec y se traslada la información a la Fiscalía, pero no se ha hecho y por ende no se ha dado ese informe que todo el mundo puede y debe conocer”, comentó el vocero de los derechos de la población carcelaria
Para conocer más detalles sobre es situación, Q’hubo intentó comunicarse en varias oportunidades con la Dirección de la Cárcel de Palogordo así como con la Dirección Regional del Inpec; sin embargo, no se obtuvo respuesta.
El secretario del Interior de Santander, Camilo Arenas, aseguró que ayer fue notificado de una novedad, pero que no se había entregado reporte de lo ocurrido.
Anunció que solicitará una inspección dentro del centro carcelario.
La Personería de Girón también se encuentra a la espera de una respuesta al requerimiento que se le hizo a la cárcel.
Sobre Rafael Támara
Hernando Mantilla, defensor de los Derechos Carcelarios en Santander comentó el que sepelio de Rafael Támara se llevó a cabo en Barrancabermeja, pero que aún su esposa no tiene una explicación clara de lo que pasó ese lunes festivo.
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Rafael, quien era el fiscal de alimentos, llegaba a entregar los productos, descargó, se quitó la camisa y en ese momento ocurrieron los hechos. “Quiso mediar y fue apuñalado”. Murió sin conocer a su hijo que tenía 18 meses. Su esposa quedó embarazada en una visita conyugal de 2019. Esa fue la última vez que se vieron, pues después se dio el tema de la pandemia. “Era un interno que tenía una condena de 22 años, y llevaba 8 años privado de la libertad, tenía 4 años de redención, es decir, que ya había cumplido la tercera parte de la pena y lo hacía merecedor a un permiso de 72 horas. No alcanzó a conocer su pequeño”, comentó Mantilla.
