Un lamentable hecho se presentó la tarde de ayer en la sede de la Unidad de Delitos contra la Fe Pública de la Fiscalía, en el edificio Manuel Gaona, una patrullera identificada como Ludy Marcela Granados Arias, de 22 años de edad, se quitó la vida frente a sus compañeros.
Sobre las cuatro y media de la tarde la joven salió de una reunión con uno de sus superiores, se sentó en una silla, miró hacia la pared y sin mediar palabras accionó su arma de dotación, disparándose a la altura de la cabeza. Tras los hechos, la mujer fue auxiliada y llevada a una clínica, pero lamentablemente falleció.
En el lugar de los hechos no se encuentran cámaras de seguridad que registraran lo que sucedió, por lo que las autoridades están investigando lo sucedido e intentan esclarecer que llevó a la joven a tomar la trágica decisión.
Según se supo, la patrullera ingresó a las instalaciones para asistir a una reunión con su jefe directo sobre la revisión de casos y consignas, posterior a eso la joven no habló con nadie más y se suicidó.
Al respecto, la madre de Ludy, Claudia Arias, dijo a Noticias RCN, que su hija estaba bien antes de ir a la reunión y que le dijo que luego de salir de eso hablaban.
“Me dijo que ella estaba en la oficina y que tenía mucho trabajo, que tenía que reunirse a algo de trabajo, pero que salía de eso y después halábamos”, aseguró Claudia.
Asimismo, la mujer manifestó que su hija le había comentado que estaba siendo acosada en la anterior sección en la que estaba trabajando, pero que no supo qué le estaban haciendo.
“Ella me comentaba que en la sección anterior que ella estaba, tenía problemas con un superior que la estaba acosando”, indicó la mamá de la víctima.
Como si fuera poco, la hermana de la hoy occisa, Glendy Granados, aseguró que su hermana fue asesinada, pues considera que a Ludy la llevaron con el hostigamiento y la presión a tomar la lamentable decisión.
“Para mí esto no fue una muerte, no fue un suicidio, para mí esto fue un asesinato”, dijo Glendy.
Igualmente, los compañeros de la patrullera revelaron que ella no padecía de ningún tipo de depresión y que nadie se esperaba lo que iba a hacer. Por ahora, los investigadores de CTI están realizando el respectivo procedimiento e interrogan a los testigos de los hechos.