Los ‘fantasmas’ que al parecer atormentaban desde hacía mucho tiempo a Lidia Caro Castellanos la vencieron y llevaron a tomar la fatal decisión de acabar con su vida.
Se habría sumergido a una pileta, en el patio de su casa. Sufriría de esquizofrenia y en varias ocasiones habría tratado de acabar con su existencia.
Ocurrió en la calle 54 con carrera 24 del barrio Galán Goméz de Barrancabermeja. Un familiar que se encontraba con ella en la casa, halló la macabra escena.
Trató de auxiliarla y reportó el caso ante los organismos de socorro, pero ya era demasiado tarde, Lidia, de 57 años, ya no tenía signos vitales.
Las autoridades recordaron que el Hospital psiquiátrico San Camilo habilitó la ‘Línea de la amistad’ donde profesionales de la salud mental atienden las 24 horas. Marque el 3053931600.