Después de doce meses de investigación,la Policía Metropolitana de Bucaramanga en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, lograron desarticular el grupo de delincuencia común organizada conocido como “los pitosos” dedicados al hurto de motocicletas en Bucaramanga y su área metropolitana.
Era un grupo criminal de gran ‘calibre’ con un modus operandi particular que les permitía salirse con la suya.
Se movilizaban a bordo de motocicletas en binomios ocasionalmente en cuartetos con el fin de realizar la búsqueda de motocicletas abandonadas y/o parqueadas frente a establecimientos abiertos al público, ante el factor de oportunidad violentaban los seguros de la dirección y sistemas eléctricos de las motocicletas.
Luego las encendían de manera artesanal. En algunas oportunidades las hurtaban de parqueaderos de edificios que no cuentan con seguridad privada.
Ya con las motocicletas en su poder, esperaban a que las víctimas realizaran publicaciones a través de las redes sociales para poderlas ubicar. Les empezaban a extorsionar con sumas de dinero que iban desde uno hasta $3 millones.
La ganancias que les dejaba el turbio negocio superaba mensualmente los $100 millones. Luego de varios operativos de allanamientos, 18 de sus integrantes fueron capturados y judicializados.