Decenas de personas se reunieron en la Casa Fúnebre Paulo VI, ubicada en la carrera 13 con calle 42 del Centro de Bucaramanga, para, con profundo amor y respeto, acompañar a los familiares en este duelo, así como también para alzar su voz y exigir justicia.
Dentro de las asistentes estaba Deisy María Rojas, habitante de la zona que presenció la feroz agresión de los caninos al niño.
“Iba subiendo sola, cargando un canasto, cuando vi a los perros encarnizados con el niño. Al principio no sabía si era un muñeco, pero vi el piecito. Eran cuatro perros, ya el niño estaba destrozado… Ahí pegué la carrera, llamé a un muchacho, salimos corriendo, lo vimos y los ahuyentamos. Desde entonces estoy trastornada, tengo dos noches sin dormir y esto me duele mucho”, expresó la mujer.
El testimonio de ella ya fue entregado a la Fiscalía y será clave en el proceso de investigación que se adelanta para judicializar al propietario de estos animales.
Sobre las 3:00 p.m de ayer, el pequeño ataúd fue llevado en una caravana hasta el Cementerio Central de Bucaramanga. Allí, el niño fue enterrado, pero será recordado por siempre como un ‘angelito’ por los suyos.
No aparecen los perros
Hasta ayer, al cierre de esta edición, la Alcaldía de Bucaramanga, la Policía y los organismos de socorro no habían sido capaces de encontrar a los cuatro perros que le ocasionaron la muerte al menor. Se desplegó un robusto operativo en la zona sin lograr ningún resultado positivo.
“Con la colaboración de la comunidad, todavía han visto perros en la zona. Estamos pidiendo justicia, pidiendo a las autoridades que nos colaboren y los agarren. Estos animales son un peligro para todos”, expresó Mauricio Lagos, allegado a la familia.
Otros nueve perros, que no tuvieron nada que ver en la muerte, el pasado jueves fueron hallados y trasladados a las instalaciones de la Unidad de Bienestar Animal. Presentaban mordeduras y estaban en extrema delgadez.
Se investiga si el propietario de estos animales tendría un negocio con estos canes considerados de raza brava, que estarían siendo utilizados en peleas clandestinas de perros.
El hombre huyó del lugar desde el mismo día de los hechos, se especula que con algunos perros, y ahora se espera que la Fiscalía avance con la investigación para establecer responsabilidades.
