Una de las causas que los expertos exponen frente al alza continua del costo en huevos y el pollo, es que la importación de los insumos para el sector avícola están por los cielos.
Aunque parezca un problema de Colombia, la presión sobre los precios es producto de una crisis económica mundial, pues la importación de insumos pagados en dólares y la devaluación del peso colombiano le están pasando la factura a millones de compatriotas.
El golpe en el bolsillo
Esto se ha sentido con fuerza debido a que en enero del año pasado el precio promedio de un huevo ‘Doble A’ era de $350, en los principales mercados mayoristas de Bucaramanga. Pero hoy en día el mismo huevo cuesta $472. Es decir que en un año el mismo huevo subió $1.20, en total subió su valor en un 34,8% más.
Pero si a los bumangueses no les alcanza para unos huevos, mucho menos para el pollo, el cual ha tenido una subida significativa en su precio.
En enero de este año un kilo de pechuga costaba cerca de $12.367, es decir subió un 43,5% más que en el 2021, cuando se podía conseguir la misma presa en $8.617.
Elevados precios
Según expertos varios factores como la pandemia, la crisis de los contenedores y ahora la guerra entre Rusia y Ucrania han llevado a que insumos claves como la soya, la torta de soya y el maíz amarillo, hayan subido de precio.
Teniendo en cuenta lo anterior, hay que sumarle que los importadores de estos insumos deben pagar en dólares y al tener un peso colombiano tan debilitado.
Según datos de la Federación Nacional de Avicultores (Fenavi), los pollos y las gallinas son principalmente alimentados con una mezcla de maíz, frijol y soya que en su mayoría son importados, ya que debido a los tratados de libre comercio, Colombia dejó de producir y ahora les toca comprarlos a los precios que el mercado internacional imponga.
La crisis en cifras
Tan solo en el año 2019 productos como maíz, soya y torta de soya tenían un costo promedio de $171 dólares, pero para marzo de este año la misma tonelada vale $347 dólares, aumentando un 203%.
La complejidad que se avecina es grande aún sin contar el problema de Rusia y Ucrania, que lo vamos a ver reflejado en un mes, cuando llegue esa materia prima que se compró con esos costos nuevos”, dijo Juan Felipe Montoya, presidente de Huevos Kikes.
Por ahora, los ciudadanos seguirán con una crisis en la canasta familiar, viendo que dejan de comprar para poder acceder a la proteína animal.