Ya van casi dos años en los que el micromercado ‘Pólvora’ se ha convertido en la mayor bendición de María Andrea y su familia.
El 9 de enero de 2021 empezó como sociedad entre padre e hija la reestructuración de la antigua tienda ‘El pollo campestre’, ubicada en la calle 18 #22c-02 del barrio Portal Campestre II de Girón.
Las ventas son su medio predilecto, con 9 años de experiencia en un almacén de ropa infantil y 5 años trabajando en un micromercado en el barrio Rincón del mismo municipio.
La atención al cliente es una habilidad familiar, “mis tíos siempre han tenido negocios y de ese entorno uno aprende cosas. Además, viví unos meses en Medellín, en los cuales adquirí la chispa”.
“Pólvora”
Organizando estantes, bodegueando y atendiendo, la María Andrea adolescente que se aterrorizaba con las exposiciones del colegio se esfumó y dio a pie a la tendera que todos los días le pregunta: “¿Cómo amaneció, mi rey/reina?, ¿Pólvora?”.
El punto tridimensional, como también es conocido, recibe vecinos todos los días de 6:30 de la mañana a 9:30 de la noche de manera ininterrumpida.
La comunidad, en relativo poco tiempo, ya se ha encariñado con la enérgica personalidad de María Andrea. “Ellas es una echada pa’ lante que empezó desde cero este negocio y su pólvora se ha echo querer” confiesa Yenny Cancino, vecina del sector.
Un eje divino
Aunque todo trabajo tiene su ‘mamey’, “desde que uno ame lo que hace, no cuesta levantarse todas las mañana” confiesa Barajas, quien le adjudica sus victorias al todo poderoso.
Siguiendo el mantra de ‘yo manejo, Dios me guía’, la hija de don Álvaro Barajas y Elizabeth Jeréz revela que siempre le irá bien porque tiene la bendición divina en el negocio de su vida.