En la defensa de la vida, del agua y del campo se despertó la motivación de Gloria Inés Calderón Basto para unir a las mujeres de su raza labriega y hacer de ellas una sola fuerza y un solo colectivo.
Ella hoy lidera la reconocida Asociación de Mujeres Campesinas y Artesanas de El Cerrito y trabaja para preservar el Páramo del Almorzadero de los efectos del extractivismo del carbón antracita.
Gloria Inés cumplió ayer, 18 de febrero, 49 años y también justo ayer recibió la gran noticia de que representará a Santander en el Premio Mujer Cafam.
Vale recordar que en noviembre pasado ya había obtenido el título de Mujer Cajasán, que es el primer requisito para llegar a la final nacional del Premio Cafam.
El jurado del concurso también le reconoció a ella el liderazgo que, desde hace más de 20 años, ostenta en programas para cerrar la inequidad y las brechas económicas entre hombres y mujeres.
Pequeño perfil
Su vida no ha sido nada fácil. A los 14 años asesinaron a su padre, Martín Calderón, quien era un gran líder campesino. Desde entonces se propuso no amilanarse y derrotar a la adversidad.
Ella nació en la vereda Morcate, Sector Siberia. Fue justo ahí en donde ella supo tallar sus manos artesanas y tuvo la tenacidad y valentía que caracterizan a las mujeres de su tierra.
Pese a las difíciles condiciones económicas en las que creció, se convirtió en una normalista, licenciada en Ciencias Sociales e incluso es máster en las TIC.
Vive en unión libre y es madre de cuatro hijas y abuela de tres nietos: “Me enorgullezco de ser una mujer rural porque, al igual que mis compañeras, defiendo la tierra que me vio nacer. Todas trabajamos como siempre lo hemos hecho por nuestro territorio, pero ahora nos damos cuenta de que ya somos vistas y que somos artesanas, productoras y defensoras de la naturaleza”.
El trabajo de la candidata de Santander al Premio Mujer Cafam, al igual que el de otras compañeras de todo el país, ha logrado impactar y generar beneficios en la vida de muchas personas dentro de los corregimientos.
Con su ejemplo de entrega, pasión y solidaridad, Gloria Inés Calderón Basto ha creado mejores condiciones de vida para sus comunidades y ha gestado nuevas oportunidades sociales.
“Quiero destacar que este premio no es solo mío, este título recae en un colectivo de grandes mujeres, que destaca el papel de la mujer rural, que cumple una labor determinante en la defensa de nuestro páramo y que tienen la capacidad de defender el agua, el trabajo, la solidaridad y la vida misma”, precisa.
Sobre el premio
Durante 34 años, el Premio Cafam a la Mujer ha tenido la oportunidad de destacar a mujeres grandiosas, ejemplo de disciplina y coraje; dueñas de sus propias convicciones, líderes de una comunidad, transformadoras de entornos y constructoras del tejido social de Colombia.
A esta nueva versión del Premio se postularon 158 mujeres en todo el territorio nacional, de las cuales 26 resultaron elegidas para representar a sus departamentos, incluyendo a nuestra candidata de Santander.
De otro lado, en el marco de la ceremonia que se llevará a cabo el próximo 7 de marzo, en el Teatro Cafam de Bogotá, se realizará un homenaje especial a las mujeres grandiosas de la ruralidad, aquellas que desde el campo colombiano inspiran a generaciones enteras al potenciar el progreso de sus familias y de sus regiones y a garantizar la seguridad alimentaria de los colombianos.
En la edición Número 34° del Premio Cafam a la Mujer estarán estas grandes embajadoras del campo y serán quienes reciban este reconocimiento por el rol que han tenido para que los productos de la tierra alimenten a todo un país.
El jurado que elegirá a la ganadora está compuesto por: María Luisa Mesa Zuleta, abogada; Juan Lozano Ramírez, periodista y experto en leyes; María Teresa Peresson de Riaño, una de las pioneras del Premio Cafam a la Mujer; Monseñor Rafael Ignacio Cotrino Badillo, filósofo y teólogo; y Germán Santamaría Barragán, reconocido comunicador social.
