Macabro y confuso. Esa es la sensación que queda entre quienes conocieron los detalles del homicidio de una joven de 22 en el año en el corregimiento de Guachaca, en el municipio de Santa Marta.
A Katerine Yiseth Higuita Banqués la encontraron sin vida dentro de su casa, en la vereda La Arepa. Fue ahorcada y encontrada colgando de una cuerda. Y aunque los primeros indicios descartaban la posibilidad de un homicidio, detalles que se conocieron después pusieron en el radar a su pareja sentimental.
Katerine fue encontrada por sus vecinos, en la mañana del sábado 23 de marzo. Fueron ellos los encargados de detener, golpear y luego entregar a las autoridades a su pareja sentimental, señalado como el supuesto responsable del crimen.
Los investigadores son los que deben indagar lo que pasó y establecer si este hombre es o no el que causó el homicidio de esta mujer.
Una hipótesis del feminicidio
Aunque todavía no hay nada establecido, las versiones preliminares apuntan a que el asesinato de la joven, de 22 años, se perpetró porque supuestamente ella quiso acabar con su relación sentimental.
Al parecer, su pareja no estaba de acuerdo con lo sucedido y habría decidido acabar con ella. Esa es la hipótesis que comentan quienes conocieron a la víctima y la encontraron atada a una de las vigas de la vivienda.
Las autoridades no se han pronunciado, pero se espera que con la aprehensión del presunto responsable avancen en esclarecer lo que sucedió.
A Higuita Banqués la trasladaron a la morgue de Medicina Legal, luego de que funcionarios de la Unidad Móvil de Criminalística de la Policía Judicial en Santa Marta.
En Cartagena ocurrió un caso similar tres días antes. La víctima es Laura Vanessa Ojeda Vásquez, una mujer de 28 años que dejó a un pequeño hijo, de 8 años.
A Laura la hallaron asfixiada con un alambre en el cuello en la mañana del miércoles 20 de marzo en la sala de una vivienda del sector La Bendición de Dios, en el barrio Loma Fresca, en las faldas de La Popa.
Por este hecho, la Policía confirmó que está capturada la pareja sentimental de Laura, un joven, de 22 años y de ocupación albañil.
