La noticia golpeó como un trueno en una noche silenciosa: Sandra Reyes, la eterna estrella de la televisión colombiana, había muerto. Nadie lo vio venir. Ni siquiera sus más cercanos seguidores, esos que estudiaban cada detalle de su vida a través de las pantallas. Su lucha contra el cáncer de seno, oculta como un secreto inconfesable, terminó llevándosela a los 49 años.
La actriz se apagó en su refugio más preciado, su finca en Ubaté. Allí, rodeada de naturaleza y del círculo más íntimo, cerró los ojos por última vez. Pero como en las mejores historias, su partida dejó un eco; uno que resonó en un rincón inesperado.Horas después, el silencio se rompió en Instagram. Una publicación apareció en la cuenta de Gerónimo Parada, el hijo que había vivido siempre en las sombras de la fama de su madre. Una fotografía en blanco y negro, casi desgarradora en su simplicidad: madre e hijo en medio de un paisaje natural, árboles altos y frondosos que parecían protegerlos del resto del mundo.
El mensaje, breve como un susurro, pero con la fuerza de un grito, decía: ”Te amo, mamá”. Y con esas pocas palabras, su duelo comenzó a revelarse.
Gerónimo, que siempre se había mantenido al margen de los reflectores, mostró un atisbo de su mundo. En su perfil, fotografías de paisajes, animales salvajes y momentos congelados en el tiempo hablaban de una mente creativa y una conexión profunda con la naturaleza. Sin embargo, esa publicación marcó un punto de quiebre. Los seguidores de Sandra, curiosos y dolidos, se volcaron en su perfil, buscando respuestas que solo él podría dar.
Mientras tanto, las redes se llenaron de voces conocidas. Marcela Mar, Robinson Díaz, Alina Lozano y otros colegas rompieron su silencio para despedirse de Sandra. Algunos recordaron su risa contagiosa; otros, la chispa que encendía cada escena que grababa. Miguel Varoni, siempre fuerte, esta vez no pudo contener las lágrimas al recordar las largas jornadas en el set de Pedro, el escamoso. “Era única”, dijo, como si esas palabras fueran suficientes para contener la avalancha de emociones.
El vínculo que trascendió la pantalla: la entrañable relación entre Miguel Varoni y Sandra Reyes
La muerte de la actriz Sandra Reyes, recordada por su icónico papel como la doctora Paula Dávila en Pedro el Escamoso, tiene al país conmocionado. Miguel Varoni, quien compartió protagónico con la actriz fue uno de los primero en expresar su pesar. El actor que interpretó a Pedro Coral, quien suspiró de amor por la doctora Paula durante toda la telenovela, escribió a través de sus redes sociales, una entrañable despedida: “Hasta siempre, mi Doctora Paula… sumercé no sabe la falta que me va a hacer. ¡Dios me la bendiga! Siempre estará en mi corazón…”
El mensaje cargado de tristeza por la pérdida de una colega, también dejó ver el cariño genuino que los unió durante años de trabajo compartido. La química entre Sandra y Miguel no solo hizo vibrar a millones de espectadores en pantalla, sino que trascendió la ficción. Sandra Reyes y Miguel Varoni lograron tener una amistad real durante años, incluso luego de dar por terminadas las grabaciones de Pedro El Escamoso.