Un hecho confuso, con muchos interrogantes y, hasta ahora, pocas respuestas ocurrió en la noche del viernes 16 de febrero en la vereda de Tierrabaja, en el corregimiento de La Boquilla.
Eran las 9:06 p. m. cuando hallaron el cuerpo de Dorismel Pardo Hernández. Tenía varias lesiones producidas con arma de fuego, que le resultaron tan graves que encontró la muerte en el acto. Otro hombre que estaba con él resultó herido.
Sobre la persona lesionada, la Policía Metropolitana de Cartagena confirmó que tiene 21 años y fue trasladada a la Clínica Serena del Mar, donde los médicos la siguen valorando. Su estado de salud, así como su identidad, son desconocidos.
Este crimen no está esclarecido, ni hay hipótesis que se hayan dado a conocer. Las labores de las autoridades están encaminadas en resolverlo y dar con la ubicación y captura de quienes lo perpetraron.
Con el homicidio de Pardo Hernández ya son 17 los cometidos en lo que va de febrero en Cartagena y sus corregimientos. Once de esos casos en sicariatos. Los ataques a bala por parte de asesinos a sueldo han ocurrido en los barrios Olaya Herrera (2), San Fernando (2), Villa Estrella, El Pozón, La Esperanza, Las Gaviotas, Simón Bolívar, Ceballos y El Carmelo.
Fútbol de luto
La partida de Dorismel ha afectado a los habitantes de su corregimiento. Las redes sociales están llenas de mensajes lamentando su violenta muerte.
“Cuanto dolor hay en mi alma, despertar y encontrarme con esta noticia. Un hermoso ser humano, bondadoso, amable, amigable. Cada vez que nos topamos, lo hacías con una gran sonrisa. Ha dolido tu partida”, dice uno de sus allegados.
La joven víctima era una promesa del fútbol; así lo comentan quienes lo conocieron y estuvieron con él en los partidos y entrenamientos. El fútbol boquillero está de luto.
