La preocupante cifra de homicidios que han surgido de riñas y actos de intolerancia continúa siendo un dolor de cabeza para las autoridades que, a pesar de haber desplegado campañas para disminuir la estadística, sigue dejando a su paso familias destruidas y hogares rotos.
El martes a las 7:30 de la noche en la calle 62D del barrio Belencito de Floridablanca, a Sebastián Gómez Hernández, de 22 años, lo mataron a cuchillo en una pelea que tuvo con un adolescente de 16 años.
Lo que le aseguró el hermano de la víctima a la Policía de Bucaramanga, es que él estaba esperando a Sebastián cuando el menor de edad llegó y en sus palabras los “invitó a pelear con cuchillos”, acto seguido llegó su hermano y ambos se fueron del lugar. Pero la muerte estaba pisándole los talones a Sebastián pues el adolescente no contento con la pacífica reacción de los dos jóvenes, fue a buscarlos hasta su casa para insistirles en la pelea.
Según el relato del hermano, en ese momento Gómez Hernández sacó un machete y salió a reñir al joven de 16 años quien tenían en su poder un cuchillo. En medio de la pelea, la víctima lo alcanzó a herir, sin embargo el menor de edad le asestó una puñalada en el pecho que lo dejó gravemente herido.
Sebastían fue trasladado al Hospital Universitario de Santander, agonizante, y aunque los médicos trataron de salvarle la vida, sus órganos vitales estaban muy afectados y falleció minutos más tarde.
Las autoridades se trasladaron al centro asistencial en donde estuvieron recopilando información sobre su agresor, y mientras eso sucedía, el mismo adolescente llegó al sitio para ser atendido por la herida que le había provocado Gómez Hernández antes de morir.
“El occiso lo cortó bastante profundo con un machete al menor, entonces apenas llegó, los mismos familiares y testigos reconocieron al adolescente, además tenía una herida que correspondía a la misma hecha con el arma con el que se había defendido el occiso”, explicó una fuente judicial cercana a las investigaciones del caso.
Al ser menor de edad, el agresor fue dejado a disposición del Centro de Servicios Judiciales para Adolescentes (CESPA) del ICBF quienes serán los encargados de hacer el proceso judicial respectivo.