Cuando falleció el verdadero Diomedes Díaz en el 2013, Armando, quien entonces vivía en el barrio Lagos II de Floridablanca, cada noche bebía hasta embriagarse escuchando sus canciones y sobre la esquina de la calle sexta prendía un veladora junto con la foto del cantante.
Desde entonces ya no lo llamaban por su nombre sino como el ‘Cacique de la Junta’.
Aunque hace varios años salió de Lagos II y se fue a vivir a Campohermoso, en Bucaramanga siempre lo recordarán por la labor social que realizaba cada 31 de octubre para celebrarles el Halloween a los niños del barrio.
“Todos los años se pasaba por cada negocio y casa recogiendo tanto los regalos como los dulces para los niños. Traía los payasos, ayudaba a organizar todo. Era una fiesta que se hacía en la mitad del barrio, empezaba desde la tarde y terminaba en la noche. Eran unas cinco horas de diversión para los pequeños y también para los grandes”,
Recuerda afligido Jorge Durán, Presidente de la Junta de Acción Comunal de Lagos II.
Armando nunca se casó ni tuvo hijos pero mucha gente lo estimaba.
En Campohermoso seguían llamándolo “Diomedes”. Vendía verdura por el sector de la calle 45, con eso se ganaba el sustento.
No aparecía desde el sábado
Pero a los vecinos de se les hizo raro que llevaba tres días sin salir a trabajar. Nadie daba razón. Un olor fétido que provenía de su casa los preocupó y supieron que algo había pasado. Decidieron dar aviso a las autoridades.
Uniformados de la Policía fueron hasta el inmueble y luego de forzar la entrada confirmaron la tragedia.
El cuerpo estaba colgado de un lazo a una columna. Estaba en avanzado estado de descomposición.
Un gentío se agolpó de inmediato afuera de la casa, nadie podía creer que tomara esa fatídica decisión.
Sus amigos más cercanos sí sabían que la presión de las deudas lo tenían depresivo, acongojado, pero nunca imaginaron que decidiera ‘colgar’ sus penas. Eso los desconcertó a todos.
En Campohermoso y Lagos II despidieron con tristeza a su “Diomedes”.