Ante un juez de control de garantías, la Fiscalía presentó a un uniformado de la Policía, quien el nueve de julio del año pasado habría acabado con la vida de una perrita en el barrio La Joya, en Bucaramanga.
“El Grupo Especial para la Lucha contra el Maltrato Animal (Gelma) presentó a este integrante de la fuerza pública, como presunto responsable de atacar a un perro”, informó la Fiscalía.
La perrita de 6 meses, de nombre ‘Hela’, fue atacada por Víctor Alfonso Gómez, un integrante de la Policía quien habría disparado su arma de dotación ocasionándole la muerte al animal.
“El hombre señaló que atacó a la canina porque, supuestamente, lo iba a morder. Sin embargo, las declaraciones y otros elementos de prueba obtenidos dan cuenta de que el animal era una cachorra de seis meses, no era agresiva y los residentes nunca se quejaron por reacciones violentas o incidentes con ‘Hela’. En ese sentido, Víctor Alfonso Gómez fue imputado por el delito de maltrato animal”, añadió la Fiscalía.
Con tan solo seis meses Hela, una perrita pitbull enrasada con terrier. Su deceso ocurrió en la cancha El Triángulo del barrio La Joya, ese 9 de julio en la noche. Según su dueño, William Prasca Villamizar, “la perrita estaba en su paseo regular, cuando dos uniformados llegaron al lugar y al ver a la mascota en su camino uno de ellos decidió realizar el disparo”.
El hombre relató que Hela “estaba jugando en la cancha con unas botellas. Llegó una moto con dos uniformados. Mi amigo y yo notamos que uno de ellos venía exaltado, con una mala actitud”.
Prasca Villamizar explicó los uniformados “señalaron a un chico que estaba en la cancha, esta persona vio que habían llegado los policías, se escondió en un rumbón que hay en el lugar, y Hela salió corriendo hacia ese sector”.
Asegura que ellos decidieron irse del lugar y comenzó a llamarla para ir rumbo a su casa. Dice que, al atender el llamado de la perrita, se encontró de frente con los policías y ahí fue cuando escuchó el impacto.
“En ningún momento Hela ladró, ni los atacó. Además, ella era una perrita muy chiquitica y siempre quería jugar. Ella estaba llorando muy desesperada, la llevamos al veterinario, pero no sobrevivió”, señaló Prasca Villamizar.