Hay consternación en los municipios de Sabana de Torres y Barrancabermeja, Santander, por el asesinato de Luis Eduardo Naranjo Benítez, de 56 años, cuya crimen es todo un misterio.
Lo que hasta el momento se conoce de la muerte de este hombre es que en la mañana del pasado martes, 31 de diciembre, salió de su vivienda en el sector de Terrazas del Puerto, en la ciudad petrolera.
Sobre las 4:30 p.m. del mismo 31, su cuerpo fue hallado por lugareños en una polvorienta trocha en la vereda El Reposo, en zona rural de Sabana de Torres.
El cadáver, según el reporte de la Policía de Santander, tenía tres heridas por arma de fuego: dos en el pecho y una en la cabeza.
Las circunstancias y los móviles que rodean este asesinato son desconocidas. La Policía anunció que ya se adelantan las investigaciones correspondientes.
El cuerpo de Naranjo Benítez fue llevado a la morgue de Medicina Legal y Ciencias Forenses, en donde se logró establecer la plena identidad.
“Mucha tristeza sentimos las personas que lo conocíamos. Era un vecino muy servicial y alegre. Mucha fortaleza a sus hijas e hijo que son lo que en este momento sufren su pérdida de su padre”, expresó un allegado a la víctima.
Segundo muerto en circunstancias similares
El pasado 15 de diciembre, a Óscar Eduardo Macías Macías, de 30 años, lo encontraron muerto en la vereda Las Pampas, a minutos del casco urbano de Sabana de Torres. Su cuerpo tenía varios impactos de bala.
‘Mono’, como le decían de cariño, había desaparecido el día anterior al trágico hallazgo. La última vez que lo vieron con vida fue en uno de los talleres mecánicos, ubicados sobre la avenida del ferrocarril en Barrancabermeja, Santander.
Según testigos, ese mismo día, un hombre, cuya identidad es desconocida, se acercó a él para pedirle que revisara una motocicleta en zona rural de Sabana de Torres. Al parecer, Macías decidió aceptar la oferta y se trasladó al municipio en cuestión. Por este hecho aún no hay capturas.