A la cárcel, bajo medida de aseguramiento, fue enviado Luis Eduardo Calambas Artunduaga tras ser señalado como el presunto responsable del feminicidio de Nathaly Cortés Montaña, su pareja, ocurrido el pasado viernes 22 de septiembre en el conjunto Palco de Barroblanco de Piedecuesta.
El pasado domingo 24 de septiembre, este hombre de 31 años fue presentado en audiencia virtual ante una juez de control de garantías. La Fiscalía le imputó cargos por el delito de feminicidio agravado, al cual no se allanó.
Durante la diligencia judicial se conocieron nuevos detalles del ciclo de violencia que la mujer de 38 años soportó al lado de Calambas Artunduaga, con quien convivió 11 años y producto de la relación tuvieron dos hijos, de 7 y 5 años.
“La sometía a acoso constante y agresivo para así conseguir y cuando ella se aproximaba a dejarlo, a separarse de usted, dejar de pertenecerle, fue también este el móvil que usted validó para quitarle la vida”, relató la fiscal del caso en la audiencia.
Se conocieron varios episodios de violencia física, verbal y psicológica que fueron denunciados en su momento por la mujer, cuando la pareja residía en el municipio de Guacheta, Cundinamarca, en los años 2017 y 2018.
“Usted cometía maltrato físico al haberle propinado un golpe en la cara, lesionándole la boca y el rostro; le decía que la tenía que dañar como fuera, le decía perra malparida. En otra ocasión, la tiró al piso y la agarró a patadas (… ) Quiso tirarla de un segundo piso y también mostraba un comportamiento de celotipia”, añadió el ente acusador.
Cansada de todos estos años tormentosos, Cortés Montaña decidió dejar a su pareja e iniciar hace un años una nueva vida en Piedecuesta, Santander, acompañada solo por sus hijos. Sin embargo, el hombre la buscó y logró convencerla para retomar la relación hace tan solo dos meses.
“Ella era una mujer joven, muy trabajadora mientras que Luis Eduardo no trabajaba, se aprovechaba del dinero y los bienes de Nathaly. La manipulaba con sus hijos menores con comportamientos agresivos hacia ella”, agregó la fiscal.
Incluso, además de los golpes e insultos, la mujer también habría sido víctima de hurto de sus pertenencias por parte de Calambas Artunduaga. Él, durante este año, ingresó por las ventanas de la vivienda y se llevó un celular, joyas y un mouse de la hoy víctima.
El feminicidio
Tras continuar de nuevo con la relación, Luis Eduardo llegó a vivir al apartamento 303 apartamento de la torre 11 el conjunto Palco de Barroblanco, ubicado sobre la carrera 3W # 14-16 de Piedecuesta, en donde además estaban sus dos hijos y un joven de 16 años, producto de una relación anterior de Nathaly.
La mujer de 31 años, oirunda de Bogotá, se ganaba la vida trabajando en limpieza para una empresa del Centro Comercial de La Cuesta y era ama de casa dedicada al cuidado de todos sus hijos.
Los problemas continuaron hasta que el pasado viernes ocurrió la tragedia. Sobre la 1:30 de la madrugada de ese día, tras haber departido en un establecimiento comercial de Piedecuesta, la pareja llegó a la residencia.
Al interior del apartamento, de acuerdo con la Fiscalía, el hombre de 31 años le quito la vida a Cortés Montaña, tras haberle propinado dos puñaladas: una en el pecho y otra en el hombro izquierdo. Se quedó un buen tiempo al lado del cuerpo sin vida.
Cometido el hecho, Luis Eduardo se dio a la fuga del lugar llevándose consigo un morral. En varias cámaras de seguridad quedó registrado la huida del sospechoso pasadas las 3:00 de la madrugada.
Ya a las 9:10 a.m., el hijo de 16 años de la víctima entró a la habitación y encontró la dolorosa escena, dando aviso de lo sucedido.
Horas después de cometido el asesinato, el sospechoso mostró su intención de presentarse voluntariamente ante las autoridades. Con la evidencia recopilada, se expidió una orden de captura y el CTI logró arrestarlo cuando se presentaba en las instalaciones de la Fiscalía en Bucaramanga el pasado sábado.
A pesar de no allanarse a los cargos que le imputaron por feminicidio agravado, una juez de garantías decidió enviarlo a prisión ante los testimonios, videos y demás pruebas presentadas por las autoridades.
