Las balas siguen silenciando vidas en Barrancabermeja, Santander. Un habitante de calle se convirtió en la víctima más reciente de estos hechos delictivo que azotan la ciudad.
El hoy occiso, identificado como Jeison Adrián Acosta Velásquez, se encontraba en la noche de este lunes 11 de septiembre en compañía de una mujer en vía pública del barrio Colinas del Sur, en la comuna 3 del Puerto Petrolero.
‘Pinina’, como era conocido este joven y según las autoridades, fue abordado por dos sujetos que se desplazaban en motocicleta.
El parrillero de este vehículo desenfundó un arma y la emprendió en contra de la humanidad de Jeison Adrián, propinándole varios tiros en la cabeza y el pecho.
Con el daño hecho, los pistoleros aceleraron la motocicleta y se dieron a la huida antes de la llegada de la Policía.
Cuando ya cesaron los cerca de nueve disparos que se escucharon, residentes del sector se atrevieron a salir para dar aviso a las autoridades e intentar socorrer a la víctima.
Sin embargo, nada se pudo hacer por ‘Pinina’, quien murió en el lugar de los hechos producto de los múltiples disparos.
Uniformados de la Policía del Magdalena Medio y agentes del CTI de la Fiscalía hicieron presencia en el lugar para recopilar evidencias, así como también efectuar la inspección técnica al cadáver. Por el momento se desconocen los móviles de este nuevo homicidio.
De Acosta Velásquez se conoció que tenía 23 años y pernoctaba en la avenida 36 de Barrancabermeja en condición de habitante de calle.
“Jeison era hijo único y a pesar de su condición de calle, tenía presente a su mamá todos los días. El problema de las drogas tiene un efecto complejo y sin los recursos necesarios, se hace difícil para que las familias puedan sacar a sus seres queridos de ese mundo”, dijo un conocido del joven fallecido.
Otros dos habitantes de calle asesinados
El pasado 25 de julio, muy cerca de donde fue asesinado ‘Pinina’, se registró otro ataque violento a mano armada en el que perdieron la vida otros dos habitantes de calle y otras dos personas resultaron heridas.
Harold Campo Albao, de 19 años, murió en el lugar de los hechos mientras que Marcelino Torres Gómez falleció días después en el Hospital Universitario de Santander, HUS, en Bucaramanga.
