En la noche del lunes, miembros del CTI con el apoyo de los Bomberos acudieron al llamado de la comunidad que encontraron un cuerpo amarrado con una soga en el cuello a un árbol.
Al parecer, el cadáver llevaba más de una semana en el lugar por su alto estado de descomposición. Estaba en el sector boscoso entre los barrios San Luis y Fontana.
Los Bomberos se encargaron de realizar la maniobra de extracción para ser entregado a la Unidad de Criminalística de la Fiscalía, que se encargará de las investigaciones.
Por ahora permanece sin identificar en Medicina Legal a la espera que algún familiar se acerque a reconocerlo. La hipótesis apuntaría a un suicidio.