La familia del ganadero Gerardo Aranda Albarracín está desesperada. Se cumplieron cinco meses de su desaparición y aún no tienen razón.
Desconocen si está vivo; sin embargo, sus 6 hijos y su esposa mantienen la esperanza de que los captores se comuniquen con ellos para darles alguna una pista.
“Ya es justo. Nadie se comunica con nosotros ni para pedir recompensa”, manifestó Gerardo Aranda,su hijo.
Debido a la zozobra que afrontan, se ‘armaron’ con carteles y pancartas para pedir información sobre su paradero. Están dispuestos a pagar una recompensa de 150 millones de pesos, a quien dé información valiosa que les permita reunirse nuevamente con el ‘jefe de la casa’.
Con el paso del tiempo la angustia crece y temen que su vida corra peligro.
El 7 de diciembre de 2020, Aranda -reconocido ganadero y palmicultor, de 71 años- salió desde el corregimiento San Rafael de Lebrija, rumbo a la finca la Alegría de la vereda Mata de Plátano en Sabana de Torres.
Desde entonces nadie volvió a saber nada de él. Pareciera como si se lo hubiese ‘tragado la tierra’. “No sabemos qué pasó, porque no han llamado ni para rescate, en caso que se tratara de un secuestro”, reiteran sus allegados.
Lo cierto es que horas después de desaparecer, se halló la camioneta blanca, de placas GHN-625, en la que se movilizaba. Estaba en un rastrojo con el motor encendido.
Testigos aseguran que varios hombres lo esperaban sobre la antigua vía que conduce al casco urbano de Sabana de Torres, en el sitio La Payandé y lo habrían obligado a que los acompañara. Sus dos celulares los habrían encontrado en una vía que conduce a la Ruta del Sol. Sin embargo, aún no se ha confirmado el secuestro por lo que se sigue manejando la hipótesis de desaparición.
La familia hace un llamado a la ciudadanía para que brinde información importante que conduzca al paradero del reconocido ganadero y palmicultor, Gerardo Aranda. Se pueden comunicar al 3182535907.