Reino Unido se encuentra en alerta sanitaria luego de presentarse una ‘plaga’ de ratas gigantescas, del tamaño de los gatos, que invaden los inodoros y las calles de la población.
Según informó el diario británico The Sun, el mayor problema de estos roedores es que tienen muchos lugares en los que se pueden alimentar.
“En este momento, hay mucha comida para ratas, con fruta madura y cultivos de cosecha, por lo que la población de ratas está llegando a su punto máximo actualmente”, explicó el medio impreso.
Debido a sus huesos altamente flexibles, que les permiten entrar en las tuberías, y su capacidad de respirar debajo del agua durante más de tres minutos, estos animales cuentan con las condiciones idóneas para albergarse en los sanitarios de los hogares.
Ante la extraña situación, el Ayuntamiento de Norwich recomendó a los ciudadanos mantener la tapa del sanitario cerrada. Además, advierten que las puertas de los garajes y las entradas deben permanecer bien cerradas para que estos animales no puedan pasar.
A raíz de la llegada de una de las temporadas más frías en 30 años, las ratas buscan comida y calidez en las viviendas. En primer lugar, se alimentan de heces humanas y ratas muertas, para luego ingresar al hogar en busca de comida fresca.
Además de los daños que pueden llegar a ocasionar, como romper cables, también pueden ocasionar enfermedades y llegar a convertirse en un problema de salud pública.
De acuerdo con información de The Sun, Peter Higgs, director de PGH Pest Control, aseguró que la mayoría de las ratas tienen en su sistema la enfermedad de Weil, una infección que pueden contraer los humanos por medio de la orina de la especie infectada y que, sin tratamiento, ocasiona fiebre, sangrado y hasta la muerte.
