La conformación del gabinete ministerial fue todo un reto para el presidente Gustavo Petro. Al nuevo mandatario le ha costado armar ese rompecabezas porque ha tratado de mantener un equilibrio entre su discurso de cambio y las cuotas de representatividad que debe entregarle a los partidos políticos tradicionales para que mantengan en firme el respaldo en el Congreso de la República.
Este proceso se ha vuelto una especie de ‘papa caliente’ para Petro y se refleja en que ad portas del evento de posesión anunció a los ministros del Interior, Trabajo, Minas y Deporte; y se espera que en la mañana de este 7 de agosto confirme quiénes serán los jefes de los ministerios de Justicia, Transporte, Ciencia, TIC, Comercio y Vivienda.
Además de la sindicalista Gloria Inés Ramírez, en el Ministerio de Trabajo, e Irene Vélez, en el Ministerio de Minas y Energía, el presidente electo designó este sábado en Twitter a Alfonso Prada, quien fue su jefe de debate en campaña, como jefe del Ministerio del Interior, y a la medallista olímpica María Isabel Urrutia como ministra del Deporte.
Baraja ministerial variopinta
Cuando empezó a decantar a sus jefes de carteras ministeriales, Petro destapó sus cartas más importantes para dirigir carteras como Hacienda (José Antonio Ocampo), Relaciones Exteriores (Álvaro Leyva), Defensa (Iván Velásquez), Salud (Carolina Corcho), Agricultura (Cecilia López), Ambiente (Susana Muhamad) y Educación (Alejandro Gaviria).
El de Corcho y Velásquez fueron dos nombramientos particulares que le costaron críticas al mandatario electo, pues la primera se ha mostrado como una férrea crítica del sistema de salud colombiano en especial frente a las Entidades Promotoras de Salud (EPS), que quiere acabar. En el caso del designado ministro de Defensa, se ha cuestionado especialmente desde el uribismo, que ha hecho críticas públicamente frente al manejo de las Fuerzas Militares.
Caso distinto ocurrió con otros ministros como los académicos Ocampo, quien tendrá la misión de impulsar la reforma tributaria con la que Petro busca recaudar 50 billones de pesos al año, y Gaviria, quien tendrá que liderar una reforma a la educación que busca ampliar la cobertura de la educación superior pública.
Otro de los jefes de cartera que tendrá un papel clave será Leyva, quien a pesar de sus bases conservadoras es cercano a movimientos de izquierda a favor de la paz y tiene la misión de liderar la “paz total” con grupos ilegales como el ELN, Clan del Golfo y disidencias, y de reactivar las relaciones bilaterales con Venezuela.
Entre los nombrados recientemente está uno de la entraña del expresidente Juan Manuel Santos. Se trata de Prada, quien se desempeñó como el jefe de debate de Petro y durante el gobierno de Santos fue director del Sena y luego fue el secretario general de la Presidencia. Ahora, como ministro del Interior, tendrá la misión de ser el responsable de las relaciones con el Congreso y de trazar políticas en materia de derechos humanos, participación ciudadana y ordenamiento territorial.
Faltan cuotas políticas
La parte más compleja para Petro conformar su gabinete de ministros ha sido la entrega de puestos para los partidos tradicionales. Esto quedó en evidencia con la demora en las designaciones que le corresponden por acuerdo políticos al Partido Liberal, Conservador, La U y la Alianza Verde, quienes se decantaron como colectividades de gobierno en el Congreso.
Uno de los que más ha presionado por el Ministerio de Transporte ha sido Carlos Andrés Trujillo, director del Conservador. El senador antioqueño espera que en esa cartera se nombre a Guillermo Reyes, antiguo contratista de la Alcaldía de Itagüí que sigue bajo el manejo de Trujillo.
Quien más fuerte suena para ocupar la jefatura del Ministerio de las TIC es María Camila Villamizar, quien sería la cuota del alcalde de Medellín, Daniel Quintero, en el gobierno Petro. Para el Ministerio de Vivienda suena Catalina Velasco, quien fue secretaria de Hábitat de Bogotá durante la alcaldía de Samuel Moreno.
En esta puja por ministerios también están el director del Liberal, César Gaviria, quien quiere quedarse con el Ministerio de Vivienda, y Dilian Francisca Toro, directora de La U, quien busca tener el Ministerio de Justicia
