La Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif) recomendó al Gobierno, el pasado fin de semana, flexibilizar algunas de las medidas restrictivas, entre ellas, ampliar los aforos (que por ahora no superan el 75 % en ciudades como Bogotá y Medellín) y eliminar el uso obligatorio de tapabocas al aire libre.
Ante esta posibilidad, el viceministro de Salud, Luis Alexander Moscoso, recordó que la pandemia sigue presente y que, “si bien tenemos niveles importantes de vacunación, todavía hay muchas personas sin ser inoculadas”. Además, continúo, si bien las vacunas previenen de efectos severos a raíz de la infección, no previenen 100 % el contagio, “por eso debemos seguir usando el tapabocas”.
Con corte al 11 de octubre el país había completado 18.815.492 esquemas de vacunación contra el covid-19, una cifra que representa el 53,7 % del total proyectado (35 millones).
“No es momento de dejarlo. Existen peticiones de algunas organizaciones para quitarlo en espacios abiertos; esto ya pasó en algunas ciudades del mundo y tuvieron que echar reversa”, dijo Moscoso e hizo énfasis en la reducción “ostensible” de riesgo cuando dos personas o más están usando mascarilla.
“El tapabocas debe seguir siendo obligatorio por lo menos durante lo que queda de año, pero si aumentamos rápidamente la vacunación y tenemos coberturas mayores del 75 % con esquemas completos, vamos a poder revaluar esta medida a futuro y considerar otras alternativas”, concluyó.