“Venimos ante la Comisión de la Verdad, y con el mayor respeto y reverencia ante las víctimas de este largo conflicto, a seguir aportando verdad para buscar mitigar el dolor y sufrimiento de las víctimas” dijo pastor Alape al inicio de su introducción y agregó que espera que la voz de los combatientes traiga explicaciones, no justificaciones. “No venimos a justificarnos, pero venimos a contar la verdad desde el contexto en el que sucedieron los hechos”.
Añadió que reconoce los vínculos que las Farc tuvieron con las Autodefensas y agregó que es difícil ver cómo, mientras ellos reconocen sus actos y piden perdón a las víctimas el país está afrontando una nueva época de violencia “Es doloroso que hoy después de cinco años de firmado este acuerdo de paz que abría perspectivas y caminos hacía la construcción de paz, estamos conociendo hechos horrendos asociados a masacres, homicidios de líderes sociales y todo lo que ha ocurrido en estas jornadas de protesta es de un tratamiento militar que ha producido un centenar de muertos y heridos”.
Por su parte, el excomandante del frente 58 de las Farc, Jhoverman Sánchez, dijo que: “si no hay un compromiso del Estado con las comunidades y con la reintegración de los combatientes, va a ser muy difícil que tengamos paz, además de que sufrimos exterminio total nos asesinaron más de 3.000 muchachos y nos dejaron en un abandono total”.
Este acto de reconocimiento estuvo enmarcado en los hechos ocurridos durante la época del conflicto armado en el país, donde de acuerdo con el presidente de la Comisión de la Verdad, el padre Francisco De Roux, 12.838 personas fueron asesinadas en la región de Urabá y el bajo atrato, además de 6.525 desapariciones.
Estos hechos tuvieron que ver en gran medida por la presencia de las Autodefensas en la región, quienes de acuerdo con el antiguo miembro del EPL Carlos Moreno Tuberquia, “solas no podrían subsistir ni expandirse, lo lograron con el apoyo de todos los gremios políticos y de las Fuerzas Militares, no hubiéramos podido sembrar el terror que generamos”.
Añadió que las comunidades indígenas y negras siempre han sido las principales víctimas del conflicto en esa zona del país, porque es central para la movilidad de los negocios del narcotráfico, por lo que agregó que si se acaba con alias `Otoniel´ principal cabecilla del Clan del Golfo y actual líder de la zona, otra persona ocupará su lugar rápidamente.
Tuberquia aceptó también que el desplazamiento forzado fue una de las herramientas que utilizaron para sacar gente que consideraban como: `Colaboradores de la Guerrilla» y añadió que si recibieron ayuda del DAS.
Por su parte Pastor Alape, dijo que la situación en el Urabá era muy difícil y que hubo un acercamiento de Fidel Castaño con las Farc para iniciar un proceso de diálogo, pero explicó que no aceptaron porque no había confianza en sus palabras.
Jhoverman Sánchez por último pidió disculpas a las víctimas aceptando que no tenían nada que ver en ese conflicto.