Las autoridades de Cúcuta, Norte de Santander, entregaron detalles sobre cómo ocurrió el feminicidio de Diana Maritza Osorio Durán, una mujer de 50 años, quien fue atacada con un ladrillo por un sujeto que está siendo buscado por las autoridades.
El atroz crimen se registró al interior de una vivienda, ubicada en la calle 26 con avenida 9, del barrio Buenos Aires, y quedó al descubierto la tarde del miércoles, 17 de julio.
Diana Maritza, según se conoció, salió el pasado martes, 16 de julio, de su vivienda, ubicada en el barrio San Martín para cumplir con una cita médica. Hasta ahí todo transcurría con normalidad.
Al terminar la diligencia, Osorio Durán se dirigió al barrio Buenos Aires para cobrar el arriendo de una propiedad de su familia, era una herencia que les dejó su abuela. Las causas del asesinato aún son materia de investigación por parte de las autoridades.
“Suponemos que cuando la mató fue justo en el momento en el que el tipo le sube el volumen a la música, por eso ninguno de nosotros escuchó gritos ni nada que viniera de esa casa”, dijo al diario La Opinión, una residente del sector.
Curiosamente y sin imaginar el fatal final que tuvo Diana Maritza, el padre de ella llegó a aquella vivienda para realizar unos arreglos en la parte de atrás. Minutos más tarde, el papá de la víctima se percató que el arrendatario estaba sacando bolsas y maletas de la vivienda, como si hubiese planeado un viaje de última hora.
“El papá de la muchacha le alcanzó a preguntar al tipo que si lo podía dejar entrar a la casa para revisar unas cosas que debía reparar, pero él (presunto agresor) le contestó que no porque ya iba de salida”, agregó al citado medio la vecina.
Ante la negativa del inquilino y sin sospechar absolutamente nada, el padre de Diana Maritza se marchó. Horas después, y al ver que la mujer no aparecía, comenzaron a presentir que algo le había pasado.
Sin embargo, solo fue hasta el mediodía del miércoles que los familiares de Diana Maritza llegaron hasta el barrio Buenos Aires para buscarla. En repetidas ocasiones tocaron la puerta, pero nadie respondió; ante esta situación decidieron tumbarla, encontrándose con la lamentable escena.
En el piso de la sala encontraron un círculo rodeado de azufre y esperma de velas, como cual acto de santería. Al avanzar varios metros, en una de las habitaciones de la vivienda, estaba el cuerpo sin vida de Osorio Durán, semidesnudo y con un evidente golpe en el rostro que, presuntamente, le causó la muerte, al parecer, ocasionado con un ladrillo.
En medio de su dolor, los familiares alertaron a los vecinos, quienes llamaron a la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) para informar lo que había sucedido.
Bajo la mirada perpleja de los curiosos, la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) realizó la inspección técnica y el levantamiento del cadáver. Pero del presunto agresor, no se encontró ni el rastro.
La única información que tienen los familiares de la víctima es que el hombre respondería al nombre de Álvaro, es de nacionalidad extranjera y sería un ayudante de cocina. Estaría viviendo en esa casa desde julio del año pasado y todos los meses, Diana Maritza iba a cobrarle el arriendo sin ningún problema.
“Nosotros exigimos justicia y que esta muerte no vaya a quedar impune como todas las de mujeres en esta ciudad. Estamos destrozados por este crimen tan horrible. Pedimos a las autoridades que investiguen y capturen a ese desgraciado lo antes posible”, enfatizó un familiar de la víctima.
Con la muerte de Diana Maritza Osorio Durán, ya son tres los feminicidios que se han registrado en lo corrido de este año en en Cúcuta y su área metropolitana.