Dos individuos supuestamente implicados en un violento intento de robo perdieron la vida cuando la presunta víctima les disparó.
El suceso tuvo lugar alrededor de las 5 de la mañana del sábado 10 de febrero, cuando fueron encontrados dos cuerpos sin vida en el paso peatonal hacia el santuario de Agua de la Virgen, en Ocaña, Norte de Santander.
El descubrimiento de los cadáveres con heridas de bala alertó a los transeúntes de la zona, que frecuentemente la utilizan para hacer ejercicio.
Más tarde se confirmó que se trataba de dos individuos sospechosos de haber perpetrado un robo.
Al mismo tiempo, un hombre ingresó al Hospital Emiro Quintero Cañizaras con una herida de arma blanca en la cabeza, alegando haber sido atacado durante un intento de robo en el paso hacia el santuario de Agua de la Virgen.
El paciente afirmó que, en medio del forcejeo, utilizó su arma de fuego para defenderse.
Las autoridades fueron notificadas desde el centro médico y se dirigieron al lugar, donde efectivamente encontraron los cuerpos de los presuntos ladrones.
Según el relato de la víctima en el hospital, quien resultó ser un expolicía y escolta, él y su pareja salieron a caminar por la mañana y fueron abordados por dos individuos armados con al menos un arma blanca.
Los presuntos ladrones intentaron robarlos, pero las víctimas se resistieron, desencadenando un enfrentamiento físico.
Uno de los atacantes hirió al expolicía en la cabeza antes de que este sacara su arma de fuego y les disparara en defensa propia.
Tras el incidente, el expolicía buscó atención médica de inmediato y proporcionó un informe de lo sucedido.
Las autoridades posteriormente identificaron a los presuntos ladrones fallecidos como Aleyso Gómez Páez, de 39 años, y Yhovany Ascanio Pérez, de 37 años. Se informó también que el arma utilizada en el incidente tenía un salvoconducto debido a la calidad de escolta del agente.