La noche del martes, un canal de aguas lluvias se convirtió en un escenario de muerte. Las detonaciones de varios disparos, provocaron pánico e incertidumbre en el barrio Carora de Cúcuta (Norte de Santander).
“Esos tiros sonaron muy fuertes, aquí todos nos escondimos y cuando ya pararon, salimos a ver qué había pasado. En el canal encontramos a un muerto, por eso, llamamos a la Policía para que vinieran rápido”, comentó una vecina del lugar.
Cuando los uniformados llegaron a ese punto de la capital de Norte de Santander se encontraron con la trágica escena. La víctima que vestía una sudadera blanca, tenis color azul y un gorro de lana, quedó en el suelo, boca abajo. En la parte superior izquierda de la espalda se lo podía ver un tatuaje.
Miembros de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) se encargaron de la inspección técnica. Aún no ha sido identificado.
¿Qué pasó?
Según algunas versiones de los vecinos que presenciaron el asesinato, la víctima iba por ese tramo del canal que pasa por la avenida 13 entre calles 1 y 2, de Carora, cuando dos hombres que se movilizaban en una motocicleta de color azul, lo interceptaron y le dispararon en repetidas oportunidades.
El día del hecho se conoció que el pistolero llegó a pie, se le acercó y le disparó en varias oportunidades, dejándolo gravemente herido.
Aunque en un principio nadie daba razón de la víctima, una vecina del lugar aseguró que se trataba de un vendedor informal que constantemente pasaba ofreciendo aguacates. Sin embargo, se desconoce su identidad pues no tenía documentación cuando la Brinho lo inspeccionó.
