Lucas Villa, el joven manifestante que recibió ocho disparos el pasado 5 de mayo en el viaducto de Pereira, durante una jornada de protesta del paro nacional, tiene muerte cerebral, según diagnosticó el hospital San Jorge de Pereira.
“A pesar de la atención especializada brindada durante estos días en nuestra unidad de cuidados intensivos el paciente no presentó ninguna respuesta neurológica posterior a suspender la sedación y el estudio imagenológico es concordante con isquemia cerebral global”, dijo a los periodistas el gerente de la institución, Juan Carlos Restrepo.
Villa de 37 años, estudiante de Ciencias del Deporte y la Recreación de la Universidad Tecnológica de Pereira estaba junto a otros estudiantes el pasado 5 de mayo en las protestas pacíficas que se llevaban a cabo en el viaducto César Gaviria Trujillo, en Pereira, cuando fue atacado por desconocidos. Recibió 8 balas disparos que lo dejaron herido gravemente. Tuvo que ser trasladado de urgencia a un centro asistencial.
En un reporte inicial del Hospital Universitario San Jorge, se indicó que Villa llegó con traumatismos por proyectil de arma de fuego en cráneo, cuello, tórax y miembro inferior derecho, por lo que de manera inmediata recibió la atención requerida.
Frente a su asesinato la Policía Nacional ofreció una recompensa de 100 millones de pesos por la captura de los criminales que atentaron contra la vida del joven.