Pese a los controles anunciados por las autoridades de Tránsito de Bucaramanga y de Floridablanca, en zonas neurálgicas persisten las indebidas filas de taxistas que parquean sus automotores a la espera de pasajeros.
En el área metropolitana la ciudadanía continúa reportando tediosos trancones en los alrededores de centros médicos como la Clínica Comuneros y la Fosunab, entre otros.
Estas filas de vehículos amarillos estacionados en plena vía pública también se observan con frecuencia en las afueras de centros comerciales como El Cacique y Parque Caracolí, aunque tales establecimientos cuentan con espacios internos para la espera y el abordaje de taxis.
Las autoridades están en mora. Mientras la comunidad solicita operativos continuos para el despeje de estas zonas neurálgicas, los taxistas manifiestan que carecen de ‘bahías amarillas’ en donde se puedan ubicar a la espera de servicios. Por ahora el caos reina en dichos entornos.