Las aspiraciones de cientos de estudiantes por ejercer sus prácticas laborales y pasantías en instituciones oficiales generalmente resultan en frustración. Bucaramanga no es ajena a dicha situación.
La falta de inclusión, la carencia de convocatorias abiertas o públicas, y procesos de selección que en muchos casos se realizan como popularmente se denomina ‘a dedo’, terminan perjudicando los sueños y proyectos de futuros profesionales, tecnólogos y técnicos en la capital santandereana.
Actualmente desde el Concejo de Bucaramanga se impulsa un Proyecto de Acuerdo que busca “fortalecer” y “dignificar” las prácticas laborales en dependencias del Gobierno Local y entidades descentralizadas del Municipio.
Esta propuesta, promovida por los concejales Carlos Parra y Danovis Lozano, pretende garantizar la participación general y transparencia para el estudiantado ad portas de su graduación, con el fin de que puedan conocer las vacantes que existen para practicantes y pasantes en entidades como las secretarías de Salud, Infraestructura, Interior, etc.
Del mismo modo en organizaciones como el Instituto Municipal de Cultura y Turismo de Bucaramanga, Contraloría y Personería.
Pero además de hacer pública esta oferta para prácticas y pasantías, la normativa que se impulsa también busca que los estudiantes sean seleccionados a través de algún tipo de concurso o evaluación, de modo tal que su elección se dé por méritos y no por favores o amistades, como ocurre en muchos casos.
“Incluimos artículo sobre auxilio de sostenimiento”
De acuerdo con lo precisado por los cabildantes, solamente resta la firma del Alcalde Juan Carlos Cárdenas para iniciar la aplicación del Proyecto de Acuerdo 011 de 2022.
“El proyecto fue aprobado por el Concejo en este periodo de sesiones que acaba de pasar y ahora se encuentra en sanción por parte del Alcalde. Por ejemplo, muchos estudiantes buscan información sin tener éxito sobre cómo acceder a una práctica en la Alcaldía o Personería. Con este acuerdo se les pide a este tipo de entidades que dispongan espacios, como en sus portales web, para que los estudiantes consulten las vacantes y se postulen”, informó el Concejal Danovis Lozano.
Anualmente en Santander se matriculan alrededor de 130.000 jóvenes en instituciones de educación superior, conforme a las estadísticas del Ministerio de Educación.
De los 27 planteles que operan en el departamento, el 70% de ellos (19) se ubican en la ‘Ciudad Bonita’ según el Observatorio de la Universidad Colombiana.
El Concejo de Bucaramanga igualmente impulsa la retribución económica o algún tipo de auxilio para aquellos alumnos que se encuentren en prácticas o pasantías.
“También incluimos un artículo sobre auxilio de sostenimiento ya que muchos estudiantes son de escasos recursos y requieren dinero para sus desplazamientos e incluso alimentación”, agregó Lozano.
Es pertinente dejar en claro que este Proyecto de Acuerdo, todavía en estudio por parte del Municipio, vincula a las entidades oficiales municipales, y no a organizaciones privadas ni departamentales.
“Se exige una plataforma para las ofertas”
La propuesta del Concejo contempla como prácticas laborales las siguientes actividades:
1. Práctica laboral en estricto sentido. 2. Contratos de aprendizaje. 3. Judicatura. 4. Relación docencia de servicio del sector salud. 5. Pasantía. 6. Las demás que reúna la definición del primer inciso del artículo 3 de la Ley 2043 de 2020.
Lo que también pretenden los corporados, según explicaron a Vanguardia, es aportar a la disminución del desempleo en la población juvenil de la capital santandereana.
Las estadísticas más recientes del Dane advierten que en el área metropolitana de Bucaramanga hay más de 35.000 jóvenes desocupados.
“Este tipo de vacantes siempre se han asignado de manera poco transparente, y en muchos casos se depende de un contacto, como el tío o el primo, para poder acceder a la práctica o pasantía. Con esta medida, el Artículo 4 establece que debe existir una plataforma digital para ofertar estas prácticas laborales”, indicó el Concejal Carlos Parra.
“Que sea una experiencia digna y educativa”
Otra situación que resulta frustrando a muchos practicantes o pasantes es el desprecio o poco aprovechamiento de sus habilidades y conocimientos por parte de las organizaciones.
En numerosos casos los estudiantes terminan haciendo otras tareas y oficios que nada tienen que ver con sus carreras de pregrado, técnicas o tecnológicas.
“El acuerdo busca que se establezcan mecanismos para asegurar que las prácticas sean una experiencia digna y educativa, y evitar así que las entidades ‘desfoguen’ las tareas con estudiantes, por ejemplo, para ponerlos a sacar fotocopias”, señaló Parra.
Además de las garantías que se impulsan para la selección por méritos, los pasantes y practicantes serán asignados de “manera paritaria entre hombres y mujeres”, resaltó el Corporado.
