Desde 1995, la plaza de mercado Asovesan del barrio Santa Ana, ubicada al lado del polideportivo, se convirtió en ‘el rinconcito campesino’ donde los vecinos disfrutan de precios accesibles y una atención cálida.
Lo que comenzó como un modesto grupo de vendedores a la orilla de la carretera antigua, con puestos tan cercanos que a veces terminaban compartiendo productos sin querer, hoy es un mercado organizado y frecuentado por la comunidad.
Este lugar abre sus puertas de lunes a domingo desde las 5:00 de la mañana hasta la 1:00 de la tarde. Los visitantes pueden encontrar de todo: proteínas, granos, legumbres, frutas, verduras y, curiosamente, hasta maquillaje, calzado y pijamas.
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La Virgen del Carmen, que da la bienvenida en la entrada, simboliza la protección y la fe que muchos comerciantes y compradores comparten. “Es una bendición tener un lugar tan organizado en el barrio para mercar”, comentan los clientes fieles.
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Redacción y fotografía: Felipe Jaimes Lagos.