Se completan 42 días de bloqueos y manifestaciones nacionales y el sector edificación sigue viviendo grandes afectaciones.
De acuerdo con la Cámara Colombiana de la Construcción, Camacol, en casi mes y medio de la situación social que atraviesa el país, 19.783 trabajadores y el 37% de las obras que se ejecutan en Santander están frenadas, esto equivale a 23 proyectos de edificaciones sin poder ejecutarse.
“Por el bloqueo de las vías nacionales se ha presentado una fuerte crisis de desabastecimiento de materiales y transporte. No solo han incrementado los costos de estos, sino que escasean productos como acabados, cerámicos, hierro y acero. Esto ha obligado a que las obras tengan que cerrar algunas cuadrillas. Así estén los empleados, si no hay los materiales, se ven obligados a reprogramarse”, afirmó Silvia Rey, gerente de Camacol Santander.
Debido al paro nacional, en el país diariamente se han dejado de despachar más de 4,6 millones de toneladas de materiales de construcción, según cifras recientes del Ministerio de Minas y Energía.
De acuerdo con Rey, algunos constructores están siendo más afectados que otros, todo depende del estado del proyecto y la gestión de los proveedores, entre otros aspectos.
Pérdidas económicas
En el país, han sido 1,3 millones de trabajadores los que no han podido desempeñar la actividad y el 74% de los proyectos están sin poderse ejecutar, informó Camacol.
Así mismo, el sector edificador ya suma pérdidas por $4,5 billones en inversión de proyectos inmobiliarios y de $2,2 billones en valor agregado para la economía en su conjunto. Las caídas en ventas son de $2.3 billones para 36 sectores productivos y más de 170 líneas de actividad económica que abastecen con insumos y materiales a los proyectos, donde predominan pymes.
Para Rey, la situación actual golpea la reactivación, ya que se pierde la inercia, el dinamismo del mercado y la confianza del consumidor, sumado a los costos que generan estos bloqueos.
El sector de la construcción fue uno de los primeros en reabrir sus actividades durante la pandemia de la COVID-19. Ha logrado una dinámica positiva en gran parte por estímulos liderados por el Gobierno como los subsidios para VIS y No VIS, que dinamizan la compra de vivienda nueva.
“Los bloqueos están dando un golpe al tejido social, al corazón de los hogares; y a las fuentes de empleo. Es una total irresponsabilidad con el país, más aun teniendo en cuenta los canales institucionales que existen para el diálogo”, aseguró Sandra Forero Ramírez, presidenta de Camacol.