En audiencia virtual, que se extendió por casi cuatro horas, la Fiscalía General de la Nación dejó en firme la acusación en contra del exalcalde de Bucaramanga Rodolfo Hernández y seis implicados más, por las presuntas irregularidades contractuales en el contrato de consultoría 096 de 2016, firmado por el Emab con José Alarcón, para la implementación de nuevas tecnologías en el manejo de residuos sólidos en El Carrasco, contrato que habría dado inicio al escándalo de presunta corrupción conocido como Vitalogic.
Según aseguró el fiscal Jorge Villamizar, el ente acusador cuenta con material probatorio, tanto testimonial como pruebas físicas, para demostrar la forma como los siete imputados participaron en el acto de corrupción del mencionado contrato de asesoría, desde su fase precontractual hasta su posterior firma y ejecución.
La Fiscalía reveló que en su poder reposan pruebas que demostrarían que Hernández Suárez intervino para que el contrato de consultoría 096 de 2016, que tenía como objeto realizar la elaboración y evaluación técnico-ambiental, financiera y jurídica para la implementación de nuevas tecnologías en el sitio de disposición final de residuos sólidos de El Carrasco, le fuera adjudicado al contratista Jorge Hernán Alarcón, como finalmente sucedió.
Para el ente acusador, Hernández Suárez, aprovechando su investidura como Alcalde de Bucaramanga y presidente de la Junta Directiva de la Emab, intervino directamente a favor de Jorge Alarcón.
Según la Fiscalía, en una reunión sostenida entre el alcalde de Bucaramanga Rodolfo Hernández Suárez y el gerente de la Emab José Manuel Barrera, a finales de junio y principios de julio del 2016, en el apartamento de residencia, del exalcalde, en Cabecera, el propio Rodolfo Hernández Suárez, le indicó a su subalterno (José Manuel Barrera) que debía escoger al ingeniero químico Jorge Hernán Alarcón, para que ejecutara el contrato de consultoría 096 de 2016. “Por estos hechos el señor Rodolfo Hernández actuó como determinador en favor de terceros”, acotó la Fiscalía.