Cabecera sigue perdiendo la imagen que en otrora posicionó al barrio como uno de los sectores más agradables, acogedores, tranquilos, limpios y seguros de la ‘Ciudad Bonita’.
Hasta hace unos años era inconcebible observar en dicho vecindario frentes de inmuebles llenos de basura, o maleza creciendo por doquier. La respuesta de las autoridades ante los llamados de la ciudadanía era tan efectiva, que no se permitían desórdenes por parte de habitantes de calle.
La situación es muy diferente en la actualidad. El panorama cambió a tal punto que incluso la ciudadanía ahora teme caminar por determinadas cuadras, como la calle 44 entre carreras 34 y 35, en donde se hallan las ruinas del antiguo Club de Profesionales.
Tal y como ocurre con este predio desocupado, la comunidad de Cabecera manifestó su preocupación ante Vanguardia debido a múltiples problemáticas que se registran en varios inmuebles vacíos, en donde usualmente se reportan desórdenes de basura y falta de mantenimiento en zonas verdes.
Además de los frentes y antejardines que sufren descuido por parte de sus propietarios, los espacios públicos que rodean tales predios también requieren mayor atención y control por parte de la Alcaldía de Bucaramanga.
“Falta más apoyo de la Administración”
Álvaro Rivera Martínez es uno de los ciudadanos perjudicados. Vive justamente en cercanías del antiguo Club de Profesionales y diariamente observa los desórdenes que habitantes de calle y consumidores de alucinógenos realizan en la zona.
“Me da mucha tristeza y frustración ver la situación de este sector. Ya hemos hablado con la Alcaldía, pero por ningún lado hemos visto resultados. Otro predio descuidado es en donde funcionó la Iglesia Sobre La Roca… cada día se ve peor. Necesitamos que las autoridades le pongan una mínima atención a los prados del espacio público, para que la gente no haga ahí sus necesidades”, manifestó Rivera Martínez.
En plena carrera 33, entre el parque San Pío y la calle 48, existen varios locales desocupados y en frentes se reportan desórdenes casi todas las noches. Líderes comunales señalan que en este punto la situación es mucho más grave, ya que denuncian problemas como drogadicción y microtráfico.
“Hay que ponerle freno a esta situación, hay muchos desórdenes por parte de habitantes de calle, consumidores de alucinógenos y la informalidad. También se debe mejorar la infraestructura y el mobiliario público, muchos andenes del sector están dañados, con huecos, y eso también impacta en la imagen”, agregó el representante del Frente de Seguridad.
Además de la preocupación que existe por estas propiedades desocupadas, la ciudadanía también señaló varios espacios públicos que se deben intervenir con el fin de mejorar el tránsito de peatones, contrarrestar la percepción de inseguridad y realzar la panorámica en tales entornos.
Una de las calles en donde se reclaman inversiones y acciones en materia de espacio público es sobre el ‘Pasaje de los Hippies’, ubicado a un costado del Éxito. A pesar de las inversiones y de los proyectos anunciados desde gobiernos pasados, hasta la fecha esta cuadra no se ha renovado.
“También las afueras de cuarta etapa. Además de los grafitis, los ladrillos están desgastados por los consumidores de droga. También faltan tapas de alcantarilla en esa calle. Hemos pasado las denuncias pero hasta la fecha no se recupera este punto”, indicó Niño.
¿Qué dice el Municipio?
Q’hubo reportó esta situación y los llamados de la comunidad ante la Alcaldía de Bucaramanga. Saharay Rojas, jefe de Gobernanza del Municipio, respondió que con el apoyo de la Policía en Cabecera se han puesto en marcha operativos especiales para garantizar la seguridad y tranquilidad de habitantes, comerciantes y visitantes.
“Cabecera es un sector con atención especial por parte de la Administración Municipal, no solo por el tipo de población que vive en esta zona, sino por la cantidad de actividades que se despliegan allí”, indicó la funcionaria.
Rojas aseguró además que se articularon múltiples entidades y dependencias del Gobierno Local y de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, con el propósito de contrarrestar los problemas de indigencia y drogadicción que existen en este icónico vecindario.
“El aseo y los habitantes de calle han sido una responsabilidad del equipo de Fuerza Pública, gestores de conveniencia y demás de los equipos de la Administración para la sostenibilidad de las zona”, dijo la Jefe de Gobernanza.
Aunque no precisó si se han impuesto sanciones, frente al caso del Club de Profesionales la funcionaria precisó que “el ornato de zonas privadas sí es una responsabilidad del propietario. Hacemos llamados permanentes al cuidado de estos entornos”.
“Estas situaciones han evitado que algunas personas tomen en arriendo este tipo de locales, porque se dan cuenta de los problemas de inseguridad y se arrepienten. Incluso, la gente ahora evita pasar por estas zonas. El comercio se ha visto muy afectado por este fenómeno de habitantes de calle y consumo de drogas. El sector se ha venido degradando”, denunció César Augusto Niño, miembro del Frente de Seguridad de Cabecera.
Los robos y los actos de vandalismo también han perjudicado decenas de fachadas en edificaciones y establecimientos comerciales. Además de vidrios partidos y paredes con rayones, los ladrones hurtaron componentes metálicos como nomenclaturas y avisos.
