Las atajadas increíbles, su buena ubicación, el liderazgo a pesar de la juventud y el buen momento con el Atlético Nacional, son algunos de los argumentos que llevaron al portero santandereano Kevin Mier a la Selección Colombia de mayores.
El hijo ilustre de Barrancabermeja, de 22 años, desde la temporada pasada venía haciendo méritos para ser llamado al cuadro nacional y la oportunidad no tardó en llegar, teniendo en cuenta que el timonel Néstor Lorenzo citó a cuatro cancerberos para un microciclo.
Allí figura el surgido en el Club Oro Negro de Barrancabermeja, al que llegó a los cinco años y se fue a los 15 para el ‘verde paisa’.
A Mier se suman Álvaro Montero, de Millonarios FC; José Luis Chunga, de Alianza Petrolera; y William Cuesta, de Deportes Tolima.
«El trabajo será liderado por Alejandro Otamendi, preparador de arqueros de nuestro seleccionado nacional. El microciclo se llevará a cabo del lunes 29 de agosto hasta el miércoles 31 del mismo mes», informó la Federación Colombiana de Fútbol.
Este es una paso importante para Kevin, quien continúa con su progreso futbolístico, debido a que hizo parte de todos los procesos de la Selección Colombia en las categorías menores, disputando Mundiales sub 17 y sub 20 y ahora le corresponde el turno de la escuadra mayor, a la que sueña con defender.
Un poco más de Mier
La historia de Kevin Mier no es diferente a la de varios porteros legendarios, que iniciaron como jugadores de campo y terminaron como cancerberos.
“Él empezó de delantero y era goleador, pero faltó una vez un portero y se animó a atajar y lo hizo muy bien”, recordó Fernando Cortina, su entrenador en el club Oro Negro, a donde llegó a los cinco años y se fue a los 15 para el Atlético Nacional, donde hoy, a sus 22 ‘mayos’, se consolida en un pórtico donde brillaron, entre otros, Lorenzo Carrabs, Raúl Navarro, René Higuita, David Ospina y Franco Armani.
Dicen que lo importante no es llegar sino mantenerse y el arquero de Barrancabermeja asumió la titularidad del ‘verde paisa’ la temporada pasada e inmediatamente demostró, a pesar de algunos errores en los primeros juegos, que podía con la responsabilidad.
Precisamente, en los instantes más cruciales, en las finales, Mier se convirtió en el héroe, al atajarle el penalti a Daniel Cataño, del Tolima, que prácticamente definió el título para el denominado ‘rey de copas’.
En la actual campaña mantiene su elevado rendimiento y es el dueño del pórtico de un equipo que inició con algunas dudas, pero ha mejorado, en parte, gracias a la seguridad que le brinda el cancerbero de Barrancabermeja.