Por: Claudia Isabel Delgado Sánchez
La restricción nocturna de parrillero en zonas críticas del área metropolitana, desde las 6:00 de la tarde hasta la medianoche, fue una de las seis medidas anunciadas ayer lunes, tras finalizar un Consejo de Seguridad Metropolitano, convocado ante la reciente ola de inseguridad que atraviesa la capital santandereana y su área metropolitana.
Sin embargo, la propuesta no cayó muy bien en todos los sectores.
Aunque aún no se ha oficializado, hay voces a favor y en contra. Incluso desde ya se estaría gestando una marcha de rechazo a la propuesta.
Faver Guerrero, motociclista y representante de la Veeduría ‘Horus’ rechazó tajantemente la decisión.
«Nosotros pagamos impuestos y otra clase de aristas para poder tener nuestras motos y esos dineros terminan en las arcas de las administraciones, que no nos garantizan nuestros derechos sino que por el contrario, nos aplican restricciones, eso no tiene lógica», argumentó.
Reveló que con esta nueva restricción, los motociclistas estarían limitados en su circulación por 11 horas, pues esta nueva medida se sumaría a la restricción nocturna, que rige en toda el área metropolitana de 12:00 de la noche a 5:00 de la mañana.
«Los motociclistas estaríamos restringidos 11 de las 24 horas que tiene el día, la mitad del tiempo no vamos a poder usar la moto a pesar de que sea en la noche. Se reduce el tiempo de uso pero no los costos, pues los impuestos se siguen pagando», dijo Guerrero.
Ante este escenario indicó que entre líderes de motociclistas y afectados se están convocando mesas internas para definir la realización de una marcha en contra de esa propuesta.
Para Faver, el tema de seguridad se está enfocando mal, según él pretenden buscar un chivo expiatorio.
«Si han visto los últimos videos, llegan hasta seis personas en grupo con diferentes motos y atracan, el parrillero no incide en la comisión del delito, porque hoy en día son bandas dedicadas al hurto en esa modalidad. Muchos de los hurtos son cometidos en motocicleta pero no todos, la mayoría son ‘raponazos’, robos a mano armada, sustracción de elementos en locales comerciales. Pretenden centrar el uso de la moto como uno de los ejes del delito y realmente es la permisividad de las autoridades», cuestionó.
«Parrillero si, pero con condiciones»
El concejal de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, manifestó que estaría de acuerdo con la medida siempre y cuando se establezcan zonas y género.
Por ejemplo que el parrillero mujer se permita y el parrillero hombre no, en zonas donde hay presencia de temas violentos.
«Si miramos la estadística, el 90% de las personas que delinquen en moto son hombres y no podemos desconocer que más del 40% de las familias bumanguesas también se movilizan en este vehículo», indicó.
Agregó que esta sería una medida de forma y no de fondo y que es la suma de varios planteamientos lo que incidirá en la disminución de la inseguridad.
«La suma de medidas como estas de alguna u otra manera limitan la posibilidad de que los delincuentes hagan de manera abierta lo suyo y eso nos lleva a tener que mirar otras vertientes como el tema migratorio, en donde hay que hacer un control más profundo. Se debe trabajar en el tema de cámaras en la ciudad. El tema de los operativos de tránsito y policía no pueden estar pensados solamente en hacer comparendos de pico y placa, deben estar enfocados en el tema de las motos que no tiene papeles, que son las que usan para delitos y en los carros que no tienen ninguna legalidad. Si el delincuente siente que la presencia de la policía está en todo lugar va a tener que reducirse el índice de seguridad en la ciudad», resaltó.
Por su parte, José Velásquez, veedor de Poder Motero, indicó a Vanguardia que apoya la medida tomada ayer en el Consejo de Seguridad.
«Si nosotros los motociclistas hemos sido víctimas de atracos en moto tenemos que hacer el sacrificio, para que entre todos logremos un beneficio para la ciudad y para nosotros mismos. No es posible que sigan matando gente desde una moto. Si queremos que haya seguridad debemos aceptar la restricción en ciertos sectores», señaló.
En redes sociales los comentarios no se han hecho esperar. Horas después de conocerse la propuesta esto es lo que opina la ciudadanía:
- En «zonas» ¡críticas! Para mí es TODA la ciudad. Eso no sirve de nada…»
- Medidas mediocres, es que a casi en el día no roban.
- Y de 6:00 a.m. a 6:00 p.m. ¿Qué medidas tomarán? Si a esas horas son las que más roban.
- Esas medidas ya se han implementado en otras ciudades del país y realmente no sirven de nada, solo perjudican a la clase trabajadora.
- Da igual, cada uno de esos manes va en su propia moto. Va a afectar es las personas que en realidad necesitan transportarse con sus familiares. Lo que se necesita es más seguridad o más retenes para requisas.
- Esa no es la solución, falta es más control por parte de las autoridades locales, la policía no está cumpliendo con su trabajo, deben hacer más patrullajes, requisar, pero se van de una vez es a perjudicar al pueblo.
De acuerdo con Juan Carlos Cárdenas, alcalde de Bucaramanga «el principal problema de seguridad que vive el área metropolitana es el microtráfico, la droga que entra al departamento y la disputa entre pandillas que la comercializan».
Crear un bolsa de recompensas conjunta para dar con los delincuentes más buscados del área, una recompensa de hasta $20 millones para quien suministre información que conduzca a la captura de Edwin Rincón Pico alias «CocaColo», cambiar el horario de rumba hasta las 2:00 a.m., solicitar al Ejército fortalecer controles al ingreso del departamento y dar con cargamentos de droga y que la Fiscalía destine Fiscales Especializados para avanzar en investigaciones de microtráfico, son las otras propuestas para avanzar en el tema de seguridad en la ciudad.