Pedro Antonio Zape, histórico arquero de la Selección Colombia, es el responsable de que Martín Viveros, actual preparador de porteros del Atlético Bucaramanga, se enamorara de esta posición en el fútbol.
“Mí ídolo era Pedro Antonio Zape. Andaba con él en la Selección Colombia, porque era la ‘mascota’ entre 1975 y 1977, cuando quedamos subcampeones de la Copa América. Salía vestido de arquero, hacía los mandados, el único que podía entrar a la concentración”, recordó Viveros, quien estuvo con la Tricolor cuando apenas tenía 12 años.
Este contacto con los jugadores, y especialmente con Zape, le permitió soñar con ser arquero profesional, un camino que comenzó a construir en las divisiones menores de Independiente Santa Fe y Millonarios, en 1981.
“Comencé en las divisiones menores de Independiente Santa Fe, pasé a Millonarios en donde hice proceso y estuve con el equipo profesional, pero no tapaba porque había cuatro arqueros muy buenos (1981)”, recordó.
Al extranjero
Al tener pocas posibilidades de atajar en Millonarios, Viveros buscó su futuro en el América de Quito, en donde estuvo por un año. Sin embargo tuvo que volver al elenco ‘embajador’ y ahí ‘pegó el salto’ a Europa, y se fue a jugar en el Juliana 31, elenco de la segunda división de Países Bajos (Holanda).
Allí tuvo una larga carrera, por casi 17 años, hasta el 2004, cuando regresó a Colombia para convertirse en entrenador de arqueros.
“En el 2005 me quedo definitivamente en Colombia. Me contrató el Bogotá F. C. en el 2009 por dos años, luego pasé a Millonarios y en el 2011 a Bucaramanga, la experiencia fue muy buena. Luego me fui a Panamá al Tauro y allá estuve diez años, en cuatro equipos grandes (Sporting de San Miguelito, Plaza Amador y San Francisco). Gané dos títulos, los mejores arqueros del torneo. El año pasado me fui del San Francisco, pasé al Umecit y me llamaron del Bucaramanga”, contó el profesional, de 59 años de edad.
A su llegada a la capital santandereana, en diciembre del año pasado, Viveros fue designado como preparador del equipo masculino, el femenino y todos los elencos de las categorías menores.
“Me gustaba mucho las fuerzas básicas para hacer corrección y que los arqueros que pasaran de categoría tuvieran una identidad. Lo más fundamental para mí es una planificación”, expresó Viveros, quien gracias a su experiencia sabe hablar cuatro idiomas (alemán, neerlandés, italiano e inglés), además del español.
Ahora, Viveros se marca el objetivo de seguir dando una mano al cuadro ‘Leopardo’ para que Juan Camilo Chaverra, el arquero titular, sigue evitando los goles de los rivales.