El caso que se volvió viral en las últimas horas por lo aterrador del video sucedió el pasado 30 de octubre en una comisaría de Policía de la localidad de Catskill, en New York.
De acuerdo con lo informado por medios locales, Jason Jones, un joven de 29 años de edad, se dirigió a la comisaría a confrontar a las autoridades luego que estos atendieran una llamada en un bar cercano. Esa mañana, el hombre llegó aparentemente bajo los efectos del alcohol, se quitó la camisa y tiró un zapato, ante la mirada de 3 uniformados.
Seguidamente tomó un tarro con gel desinfectante, lo roció en el hombro izquierdo, luego en la cabeza y posteriormente en la espalda. Los agentes lo siguieron y trataron de calmarlo, pero no pudieron.
Uno de ellos sacó una pistola taser, apuntó y la accionó. Cuando los otros 2 compañeros lo iban a detener, la descarga eléctrica generó que el sujeto se prendiera en fuego, al parecer, por el contacto con el gel.
El joven rodó en el suelo de la estación tratando de sofocar las llamas, mientras que los uniformados abandonaron por unos segundos la oficina. Luego de haber sofocado él solo las llamas, un agente regresó y lo ayudó.
Minutos después, una médica llegó a la comisaría y lo trasladó al Centro de Trauma y Quemaduras de Westchester, donde falleció el 15 de diciembre tras haber estado mes y medio conectado a un respirador. El video apenas trascendió en las últimas horas.
Autoridades investigan
El caso está en poder de la Fiscalía, que se encuentra adelantando la correspondiente investigación para determinar con claridad qué sucedió esa fatídica mañana.
En cuanto al video de la cámara de seguridad de la estación, este fue hecho público por el ente investigador por motivo de transparencia institucional. Tras su divulgación, las grabaciones se volvieron virales.
