Mientras avanza una nueva evaluación de los 34 proponentes que se presentaron en la cuestionada licitación para la construcción de la doble calzada La Virgen – La Cemento, crece la preocupación por el futuro de una decena de obras viales, previstas en el Convenio 113, operado por el Idesan.
Las decisiones que pueda tomar el Gobierno Nacional debido a la desconfianza con el operador, tiene a los demás integrantes del Convenio y a los gremios con los nervios de punta.
Representantes del Invías y la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI, han declarado públicamente y a través de varios oficios, su rechazo a las irregularidades presentadas en la primera evaluación de proponentes del proceso de La Virgen – La Cemento, y han anunciado su intención de retirarse si no se cumple con la finalidad del mismo.
El director del Invías, Juan Esteban Gil, ha manifestado públicamente su descontento con el manejo que el Idesan le está dando al Convenio y ha propuesto cambiar de operador.
Mientras tanto los empresarios y gremios, presentes en el proceso a través de Prosantander y la Sociedad Santandereana de Ingenieros, piden que el convenio se mantenga, pues de liquidarse el futuro de obras para la mejorar la infraestructura vial de la ciudad quedarían bajo incertidumbre.
Las obras en riesgo
El Convenio 1113 fue firmado en agosto de 2016, tras la liquidación de la concesión ZMB, que fue liquidada por incumplimiento.
En el nuevo acuerdo, instituciones como Invías, la ANI, la Gobernación de Santander, la Aeronáutica Civil, la Alcaldía de Bucaramanga unieron esfuerzos para la ejecución de las obras inconclusas.
Entre las más relevantes se encuentran dos tramos que resolverían la movilidad del transporte de carga y conectividad de los bumangueses hacia el norte del país, la doble calzada La Virgen – La Cemento y su continuidad hasta el municipio de Rionegro.
Pero el Convenio 1113 contempla además la rehabilitación, mejoramiento y mantenimiento de tramos dentro del área metropolitana de Bucaramanga, como Palenque – Café Madrid y el sector entre la T del aeropuerto y el municipio de Lebrija.
Hay obras que ya se han venido ejecutando dentro del Convenio como la repavimentación de todo el tramo entre La Salle y el peaje de Lebrija.
Para el ingeniero Rodrigo Fernández, integrante de la Sociedad Santandereana de Ingenieros, sería “un grave problema si el gobierno nacional decide modificar el Convenio”.
Los proyectos previstos suman cerca de 350 mil millones de pesos, recaudados en los peajes de Lebrija y Rionegro, con un agravante y es que en este último el cobro está suspendido por protestas y daños durante el paro nacional.