Tras insistir por 45 años de matrimonio junto a su esposo Maldhari, de 75 años, traer al mundo un hijo, lo acaba de lograr mediante fecundación in vitro, con lo que se convierte en una de las madres primerizas más longevas del planeta.
Después de intentar por décadas traer al mundo de forma natural a un hijo, finalmente fue con ayuda de la ciencia que la buena noticia llegó a la aldea Kemora, en el estado de Gujurat, donde vive la pareja de septuagenarios.
De acuerdo con la información que recogen medios internacionales, eran bajas las expectativas de que estos ancianos trajeran un hijo al mundo, pero gracias a la unión del espermatozoide con el óvulo en un laboratorio, se dio el milagro.
Médicos y todo el personal de salud que atendió el nacimiento quedaron extrañados una vez vieron al bebé en brazos de Jivunben, quien, aunque no mostró su cédula, asegura estar en el séptimo piso.
Eso sí, el récord de la mujer más longeva en traer una vida al mundo no es de ella, pero lo ostenta otra septuagenaria de la India, Erramatti Mangayamma, quien tuvo gemelas a sus 74 años.