De hecho, en uno de estos depósitos de chatarra se encontraron múltiples componentes y objetos que conforman el mobiliario público de la ‘Ciudad Bonita’, como recipientes metálicos de basura y lámparas del sistema de alumbrado.
Durante el último año la comunidad y Q’hubo han realizado numerosas denuncias y publicaciones sobre el robo de tapas y rejillas de las redes de servicios públicos en el área metropolitana, al igual que ocurre con las barandas y pasamanos en puentes.
Incluso, hace apenas ocho días atrás este medio de comunicación publicó un informe sobre el inédito hurto de 14 postes de alumbrado en la Transversal El Bosque.
En un operativo liderado por la Secretaría del Interior de la Alcaldía de Bucaramanga y en apoyo con la Policía Metropolitana, ayer se inspeccionaron 7 chatarrerías en tres sectores neurálgicos de la capital de Santander: Gaitán, Girardot y Comuneros.
Además del depósito en el cual se encontraron componentes del mobiliario, en otros cuatro negocios de este tipo también se impusieron sanciones policivas tras evidenciarse “que no tenían requisitos de funcionamiento”.
“Encontramos mobiliario urbano del municipio, y como consecuencia se suspendió un establecimiento de comercio por almacenar y comercializar mercancías, sin demostrar su lícita procedencia”, precisó Melissa Franco, secretaria del Interior de Bucaramanga.
Es importante dejar en claro que uno de los parámetros que deben cumplir las chatarrerías es la no compra de objetos como tapas de alcantarillado y mobiliario público. La comunidad ha denunciado que los ladrones de estos metales operan en complicidad con depósitos y fundidoras que trabajan con este tipo de materia.
“Continuaremos con los operativos en diferentes puntos. Se denunciará a las autoridades competentes aquellos lugares donde encontremos mobiliario urbano de la ciudad”, dejó en claro la Secretaria Melissa Franco.
