Luego de que varios ciudadanos taponaran vías de Floridablanca con arrumes de basura, desesperados con los malos olores y con la contaminación ambiental que ha reinado durante los últimos días, el gobierno de ese municipio informó que escogió un sitio provisional para la disposición final de tales residuos sólidos.
El lugar seleccionado es el Relleno Sanitario La Pradera, que está ubicado en la localidad de Don Matías, a 57 kilómetros de Medellín.
Tal botadero tiene licencia ambiental otorgada por Corantioquia en 2002 y funciona desde el año 2003.
Dicho relleno es de propiedad de EPM y, según dijo el alcalde de Floridablanca, Miguel Ángel Moreno Suárez, “ese será un destino temporal de la basura”.
A diario Floridablanca produce 260 toneladas de residuos sólidos. Y tras el anuncio del traslado de la basura a la zona antioqueña, muchos usuarios temen que se les incremente el valor de la tarifa.
Ante esa preocupación, la Alcaldía de Floridablanca respondió que el municipio asumirá un buen porcentaje del traslado para aliviar un tanto el bolsillo de los usuarios.
Pese al anuncio oficial, al cierre de esta edición se reportaban otros bloqueos de vías con arrumes de basura en el barrio Los Andes y en la vía de acceso al Ecoparque Cerro del Santísimo.
DURO PRONUNCIAMIENTO
Desde el Concejo de Bucaramanga y el Senado de la República se advirtió ayer que “el futuro de la EMAB estaría en riesgo con la decisión judicial del cierre de El Carrasco y dejaría como gran ganadora a la multinacional que maneja la basura”.
Sobre este tema, el concejal de Bucaramanga, Francisco González Gamboa, manifestó que “la actual situación de las basuras y la orden de cierre de El Carrasco perjudica las finanzas de todos los ciudadanos y deja como gran ganador a Veolia”.
Indicó que “hay gran inquietud, pues la multinacional Veolia es dueña del negocio de la basura en Cúcuta, Aguachica y Barrancabermeja y además es dueña de los terrenos de Chocoa, donde se adelantan estudios para un relleno sanitario”.
El corporado indicó que “la decisión judicial no deja otra opción a los municipios que disponer en una de las tres ciudades, dejando en jaque el funcionamiento de la EMAB y los sobrecostos que tendrán que asumir los usuarios, sea vía tarifa o sea vía presupuesto del municipio”.
Por su parte, el senador Jaime Durán Barrera manifestó que “pareciera que estuviéramos en una ‘patria boba’. Un juez dice que se debe cerrar El Carrasco y, según estudios este tiene, al menos, dos años más de vida útil y aún así lo quieren cerrar ‘a la brava’.
Durán Barrera aseveró que “un juez toma una decisión que es rarísima y la Superintendencia viene prácticamente a lo mismo, mientras los grandes perjudicados son la Empresa de Aseo de Bucaramanga, los municipios y la ciudadanía”.
El congresista, junto con el corporado González Gamboa, enviaron una carta a los Ministerios de Ambiente y Trabajo, la Superservicios, la ANLA y la Procuraduría en la que se les solicitan a las entidades de control, conformar una Mesa Técnica que logre una solución jurídica y permita que la basura se arroje de manera temporal en El Carrasco”.
Finalmente, el subsecretario de Salud y Ambiente de Bucaramanga, Helber Panqueva, dijo que en el caso de tener que disponer las basuras en Aguachica, que queda a más de 170 kilómetros de Bucaramanga, “las tarifas a distancias tan largas se dispararán enormemente”.