Teniendo en cuenta las grandes secuelas que ha dejado la pandemia en cada uno de sus negocios y argumentando que la reactivación económica está en marcha para todos, menos para ellos, los dueños de los establecimientos nocturnos de Bucaramanga les solicitaron a las autoridades autorización para poder atender a sus clientes hasta las 2:00 a.m.
Según René Rincón, vocero de Unibares, “queremos llamar la atención de los gobiernos Municipal y Departamental, para que nos escuchen y en lo posible se nos amplíe el horario de funcionamiento hasta las 2:00 a.m.”.
Aseguraron que promoverán, de manera pacífica, una especie de ‘plantón’ el próximo 22 de Julio, en la Puerta del Sol, para que su petición sea escuchada en el próximo Puesto de Mando Unificado, PMU.
“Si bien somos conscientes del tema de la pandemia, también es fundamental dejar atrás la estigmatización con los establecimientos nocturnos, toda vez que a ellos les achacan la aceleración de contagios por la COVID-19, cuando muchos de ellos han tenido paralizadas sus labores, con la pérdida de empleos y el cierre de por lo menos el 80 por ciento”.
Vale decir que antes de la pandemia, en Bucaramanga y el área existían 1.495 negocios de estos constituidos legalmente ante la Cámara de Comercio, y aproximadamente el 60% de ellos cerraron sus puertas definitivamente durante el virus.
Y según los balances de ese gremio, son muchas las familias en Santander que dependen de los negocios nocturnos y que mantienen la expectativa porque se dé de una vez por todas las anhelada reactivación económica.
Y agregó que, “mientras a nosotros nos atan las manos para abrir más tiempo, proliferan las fiestas clandestinas que en últimas son las que más han disparado los contagios de la COVID-19. Muchas personas se las ingenian para organizar rumbas ‘piratas’ violando todas las normas de bioseguridad y a ellas nadie les pone los debidos frenos”.
Por su parte, Rafael Mendoza, vocero de la Asociación Colombiana de la Industria Gastronómica, dijo que son muchos los establecimientos comerciales que aún no han podido recuperarse por cuenta de la pandemia y posteriormente el paro nacional.
“Las ventas en mesa no se han recuperado, seguimos en muchos establecimientos con ventas a través de domicilios, aunque la temporada vacacional representó una mejora en los establecimientos comerciales”, afirmó.