Las calles de Bucaramanga eran un lienzo de manifestación artística para Juan Felipe Fuentes Meza, conocido por sus familiares, amigos y la escena cultural de la ciudad como Pinky, el apodo que se le atribuye a su icónico personaje de gorrito rosado con el que abordó temas como la vulnerabilidad y las emociones humanas, los cuales quedaron plasmados en diferentes locaciones por donde la gente camina y se transita a diario.
En una reciente entrevista, Pinky recordó cómo un video de YouTube del colectivo europeo 1up fue revelador para su carrera como artista visual en la ciudad. Allí evidenció cómo diez artistas intervienen con pintura un tren, un momento que lo motivó a compartir sus creaciones a otro nivel y soñar en grande. “La calle está para manifestarse”, afirmó en La Piscina Vacía mientras pintaba una de sus creaciones en un bastidor.
Influenciado por el cómic, Pinky siempre estuvo en constante cambio y transformación a través de diversos personajes que reflejaban sus vivencias y cómo percibía un mundo que no acostumbra hablar abiertamente de la angustia o la tristeza.
El arte de Pinky ya era visible, admirado y reconocido por diferentes artistas urbanos en Bucaramanga en 2019, año en el que se unió a ‘Tres Perros’, el colectivo artístico conformado por Sebastián Gómez Vargas, Anderson Niño Durán y Kevin Pinto.
“Siempre le dije en vida lo mucho que lo admiraba y que lo consideraba uno de los mejores artistas urbanos de la ciudad, para ser tan joven, Pinky tenía una línea gráfica y conceptual muy definida y específica. La forma en que por medio de su personaje visibilizaba temas que normalmente no son puestos en el espacio público era única. Su narrativa giraba en torno a las emociones y sentimientos. Nos invitaba a reflexionar y ahondar en la tristeza y el dolor, contrastando estos temas con un personaje vestido de rosa y con aspecto de niño, enfocándose en que estos sentimientos desde que somos pequeños los sentimos y que está bien sentirse mal y no debemos ocultarlos o fingir que estamos bien y que todo es perfecto”, sostiene el artista plástico santandereano y miembro del colectivo ‘Tres Perros, Sebastián Gómez.
Sus amigos lo recuerdan como un joven lleno de compromiso, dedicación y entrega con sus manifestaciones artísticas, de aquellas charlas en las que discutían sobre cómo la televisión, la publicidad y los medios de comunicación solo mostraban la cara feliz del mundo. “Recuerdo muchos los consejos, las charlas, los chistes, las risas con él, y el parche. Recuerdo su juicio, su metodología para todo. Él es un hermano, un maestro, un ejemplo para mí. Eternamente Pinky Lover”, afirma el artista Kevin Pinto.
A los mensajes de recuerdo y agradecimiento con Pinky también se unió el artista Andersson Niño Durán. “Pinky, mi amigo, mi compañero y mi hermanito. Tanto que me enseña, tanto que me regaña y tanto que quiere verme bien. Le debo mucho y lo sabe, siempre conté con usted para cualquier cosa, y quiero que sepa que seguirá siempre vivo en mí, en mis acciones y en mis pintas. Te quiero mucho, socio. Descansa en pintura”.
Un homenaje a Pinky
Artistas urbanos suman sus condolencias y agradecimiento por el trabajo de Pinky en un homenaje que se llevará a cabo hoy, 19 de mayo, en el intercambiador Mesón de los Búcaros. Allí se realizará una jornada de graffiti y muralismo en su honor. Puede hacer parte de esta iniciativa a partir de las 7:30 de la mañana.
