El alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, se pronunció a través de sus redes sociales sobre el asesinato de Juan Carlos Cassanova Ochoa, comerciante y prestamista, ocurrido en la mañana de este martes, 23 de abril, en el barrio Girardot de la capital santandereana.
El mandatario local afirmó que las investigaciones ya se avanzan para esclarecer este grave hecho de violencia que ha generado consternación entre la ciudadanía.
“Según primeras versiones de la Policía, se descarta una posible extorsión, la víctima no tenía amenazas de este tipo. La Policía investiga hipótesis sobre posibles temas personales, que podrían ser las causas del hecho”, dijo el alcalde de los bumangueses.
El crimen fue cometido por dos sicarios que llegaron hasta ese establecimiento ‘Repuestos Casanova’, propiedad de la víctima y ubicado en la carrera 26 con calle 11 del barrio en mención.
Allí, uno de los pistoleros le propinó seis disparos al hombre de 46 años de edad.
Ya se están analizando las cámaras de seguridad de la zona y de la Policía para ubicar el escondite de los responsables del homicidio”, añadió el alcalde.
Quedó en video
En cámaras de seguridad quedó registrado el asesinato de Juan Carlos Cassanova Ochoa, el comerciante y prestamista, a manos de sicarios en la mañana de este martes, 23 de abril, en el populoso sector de los talleres del barrio Girardot de Bucaramanga
En las imágenes se muestra a las 8:09 a.m. a la víctima en la parte externa del negocio reparando el rin de una llanta.
Al lugar llegaron dos sujetos en una motocicleta. El parrillero, quien vestía de jean, chaqueta negra y no se quitó el casco, se bajó, sacó un arma. Corrió hasta el sitio en donde se encontraba Cassanova Ochoa con otra persona y activó su arma.
En ráfaga, de acuerdo con el video, empezó a dispararle al comerciante, quien intentado esquivar las balas se lanzó a la carretera sin importarle ser arrollado por un carro, que lo alcanzó a golpear.
Estando en el piso, el pistolero aún le seguía disparando. La víctima, ya herida de gravedad, dio varias volteretas en la carretera.
El sicario se devolvió a la esquina y se subió a la motocicleta para darse a la fuga junto a su cómplice.
El material audiovisual muestra que el atentado se cometió en 11 segundos.
Sobre el mediodía, mientras recibía atención médica, el comerciante desafortunadamente terminó perdiendo la vida.
“Presentaba seis heridas por arma de fuego en diferentes partes del cuerpo, algunas de ellas con orificios de entrada y salida”, señaló un informe de la Policía.
“Según la información aportada por los familiares, él era propietario del local de razón social Repuestos Casanova. De igual manera, prestaba dinero solo a personas conocidas. Analizamos la versión si detrás de su muerte estaría el no pago de una extorsión, pero esto es materia de investigación”, aseguró a Vanguardia una fuente policial.
Del hoy fallecido Q’hubo conoció que era padre de dos hijas, le decían de cariño ‘Caliche’, residía en el barrio Cabecera de la capital santandereana y se ganaba la vida como propietario del negocio de venta de repuestos mencionado previamente.
Su cuerpo fue trasladado a las instalaciones de la morgue del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses del barrio Campo Hermoso, en el occidente de la ciudad.