Un juez con funciones de control de garantías impuso medida de aseguramiento intramural contra Julieth Vanessa Martinez Cantillo, alias Johanna, pareja sentimental de Ober Ricardo Martínez Gutiérrez, alias el Negro Ober, cabecilla de la banda criminal Los Rastrojos costeños, que la semana pasada amenazó a comerciantes y a la Fuerza Pública de varias regiones del país, precisamente, por la captura de su pareja.
De acuerdo con la investigación de una fiscal delegada ante el Gaula, la procesada, al parecer, tomó el control de las finanzas de Los Rastrojos costeños, luego de que su compañero sentimental, “Negro Ober”, fuera enviado a prisión por los delitos de concierto para delinquir, homicidio, tentativa de homicidio, entre otros.
Además, las labores de policía judicial determinaron que la mujer, presuntamente, recibió, el año pasado, $14 millones de pesos de dos transportadores de Soledad, Atlántico, a cambio de no atentar contra sus vidas.
Por estos hechos la Fiscalía le imputó a “Johanna”, los delitos de concierto para delinquir y extorsión, ambos agravados. La procesada no aceptó los cargos y fue enviada a la cárcel El Buen Pastor de Barranquilla.
Alias Johanna fue capturada el pasado jueves 23 de marzo en un operativo especial en Barranquilla en el que otras 41 personas fueron detenidas por su presunta participación en delitos de extorsión y tráfico.
Cuartenta y ocho horas después de la captura, el “Negro Ober” reapareció en un video grabado desde la cárcel Palogordo de Girón, Santander, intimidando a comerciantes y a la policía por la captura de su pareja.
“A mi mujer no la van a poner a pagar por los actos míos, yo pago y me hago responsable de mis actos; mi mujer no tiene nada que ver en nada (…) se murió el fiscal Pecci, también se puede morir cualquier fiscal. Estoy decidido a hacer lo que sea, o me sueltan a mi mujer o acabo con todo, que Dios los bendiga”, dijo el cabecilla.
Tras sus declaraciones, que se hicieron virales, las autoridades ordenaron su traslado a la cárcel de máxima seguridad de La Dorada, Caldas, adonde llegó el pasado martes quejándose por el trato que estaba recibiendo, pues durante el traslado fue esposado de manos y pies.
“Solicito una revisión señor director, cabeza de monda… primera vez que me ponen unas esposas de manos y pies maldita sea… Este director, Dios santo. Primera vez que me esposan de manos y pies, en mis tres carcelazos, maldita sea”, dijo el hombre, que purga una condena de 50 años, que ha pagado en ocho prisiones diferentes.
La Procuraduría investigará a los guardianes del Inpec que habrían permitido el ingreso de celulares, licor, drogas y joyas, entre otros elementos prohibidos, a la celda de “Negro Ober” en la cárcel de Girón.
El Inpec, por su parte, declaró insubsistente a Jorge Alberto Contreras, director de la cárcel de Girón en la que “Negro Ober” se encontraba el condenado.