Justo antes de salir al escenario, ante un teatro con más de 1.700 personas, el comediante Frank Martínez, el “Flaco”, sintió un ataque de ansiedad que lo paralizó. No era la primera vez que experimentaba esa sensación, pero sí era la primera que le impedía estar ante su público. Ese día les tocó a sus compañeros y amigos Chicho Arias y Adrián Parada, de Monólogos sin propina, hacer el show sin él.
Tras esa crisis, de la que no se recupera totalmente, el comediante tomó la decisión de hacer un alto en su carrera a partir de 2023 y concentrarse en su salud mental.
“Todos los shows programados hasta diciembre los cumpliré, espero verlos, ustedes también son mi terapia”, dijo Frank, al reiterar su decisión de alejarse por un tiempo no determinado de la comedia y la televisión.
No es el primero
El caso del comediante, al que le cambió su vida radicalmente (con más visibilidad, exposición y agenda de trabajo) desde que en 2021 fue finalista del reality “Master Chef Celebrity” no es el primero en el mundo del entretenimiento.
El músico J Balvin, el comediante Dany Hoyos (creador e interprete de Suso), el youtuber Juanda y los actores Diego Cadavid y Santiago Alarcón, entre otros, han hablado públicamente de los cuadros de depresión y ansiedad que han sufrido en diferentes momentos de su vida.
En el mundo son famosos los casos de los cantantes Selena Gómez (de la que Apple TV estrenará el 4 de noviembre el documental “My Mind & Me”) y de Justin Bieber, que han tenido problemas en sus carreras por padecimientos como ansiedad y depresión, así como el exfutbolista Andrés Iniesta.
Presión adicional
La psicóloga Julieth Zapata, directora de la maestría de Psicología Clínica de la Universidad San Buenaventura de Medellín, explica que hay ciertas profesiones que sí representan un incremento del riesgo, en relación al padecimiento de ciertas patologías, como puede ser la ansiedad o la depresión.
Dice que aunque no existen estudios rigurosos que expongan que las personas famosas tengan más riegos que las otras, “sí hay factores de riesgo, porque sus oficios implican trabajar bajo presión y altos índices de estrés”.
Para Juan Pablo Gallo Botero, psicólogo y terapeuta gestáltico, el ejercicio del entretenimiento hace que las personas estén expuestas y se note más este tema. Señala que frente a estas hay un sesgo, porque se supone que porque son famosas y exitosas (profesional y económicamente) no pueden tener estos problemas y menos quejarse.
Mal general
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud Mental de 2015, que fue la última que se hizo en el país, el 40 % de la población colombiana sufre sintomatología ansiosa.
A nivel global, la OMS (Organización Mundial de la Salud) señala que el 30 % de la población adulta sufre de algún diagnóstico mental, lo que habla de una problemática de gran impacto.
La psicóloga Zapata expresa que estos temas afectan a todos por igual, sin importar condición social, económica o académica, y que al igual que los “famosos”, las personas deben atender sus padecimientos y seguir adelante con sus vidas, con su oficio o profesión.
El psicólogo Gallo Botero expresa que es muy raro que se publique una historia de un contador o de un abogado que saque una semana de vacaciones porque está deprimido, en cambio en los famosos el tema se vuelve mediático y tema de conversación.
Cuenta que cada día en las IPS (Instituciones prestadoras de salud) aumentan las consultas e incapacidades por padecimientos mentales.
La directora de la maestría de Psicología Clínica de la Universidad San Buenaventura destaca que el hecho de que los “famosos” expongan públicamente sus afectaciones es válido “porque las sensibilizan y muestran que cualquiera la puede tener”.
Reitera que lo importante es que en esa visibilidad que hacen de sus problemas cuenten que están en tratamiento médico, que se requiere de un procedimiento profesional, que no es problema menor.
Hoy, Frank Martínez tiene claro que la mejor manera de superar los problemas de ansiedad y depresión es alejarse, tomar distancia, preocuparse más por él mismo que por el trabajo. Ese es el camino para volver a estar frente a los escenarios y las pantallas de televisión haciendo lo que más le gusta: hacer reír a los demás, hacerlos felices .