La carrera de la artista estadounidense Lady Gaga es una de las más consolidadas y versátiles del mundo del entretenimiento. Además de las canciones, Lady Gaga es sinónimo de una talentosa del cine, una empresaria con su propia firma de maquillaje y comprometida con varias causas sociales.
En días pasados, ha sido noticia por su trabajo interpretando a Patrizia Reggiani, en “House Of Gucci” (“La Casa Gucci”), una mujer italiana ambiciosa que se casa con un heredero al trono de Gucci, Maurizi. Pero todo cambia cuando le pide el divorcio y Reggiani empieza a planear su asesinato.
“Lo primero que pensé cuando leí el guión fue: ‘Ok. Quieren que una mujer use su cuerpo y su manipulación para obtener dinero de este hombre increíblemente rico’. Y cuanto más indagué, me di cuenta de que ella estaba realmente enamorada de él”, aseguró Lady Gaga al hablar con la revista Variety sobre su personaje.
“Las mujeres somos criaturas complejas y nunca se trata de una sola historia. Son muchas”, añadió, al asegura que “cuando pienso en ella como personaje, pienso en mí tomando pedacitos de vidrio de toneladas de mujeres diferentes y encapsulándolos en un personaje que todavía creo que es verdaderamente ella”, confesó.
Pero lo que llama la atención de la entrevista fueron los comentarios sobre el capitalismo en el segmento “Actors on actors” impulsado por Variety, junto a Jake Gyllenhaal.
“El patriarcado y el capitalismo destruyen a las mujeres todo el tiempo. Nos arruina de una manera que creo que la gente no siempre ve. Y creo que lo ocultamos bastante bien. Hay herramientas: moda, cabello, maquillaje, todo tipo de cosas que se han inventado para ocultar nuestro dolor”, dijo la artista.
En redes sociales, los internautas no tardaron en reacciona a sus declaraciones al tildarla de “hipócrita”, pues ella es una de las artistas más ricas de la industria, con un patrimonio de alrededor de 320 millones de dólares.
Igualmente algunos usuarios dijeron que Lady Gaga se contradice diciendo que el capitalismo es malo porque arruina la vida de las mujeres, cuando ella vive en una mansión valorada en 24 millones de dólares en Beverly Hills, California.