El indignante caso de irrespeto se presentó en el barrio La Carola, de Manizales. En medio de una ronda, autoridades recibieron una llamada por un posible caso de violencia familiar en dicho sector, al llegar verificaron la denuncia.
La víctima confesó a los uniformados que tenía problemas con su hijo quien estaba actuando de mala forma y usando posesivamente el celular.
Al parecer, al señalado se le acabaron los datos móviles para navegar en internet, por lo que le pidió dinero a su mamá para recargar, la mujer habría dicho que no, respuesta que desató la ira del adolescente quien empezó a agredirla física y verbalmente.
«El conflicto inició cuando al joven se acabó la recarga que tenía y este le pidió dinero para poder seguir utilizando su móvil. Esta situación conllevó a que la agredirla físicamente porque no accedió a su pretensión”, señaló la Policía Metropolitana de Manizales.
Autoridades habrían intentado mediar con el agresor; sin embargo, este sin importare su presencia habría vuelto a agredir a su progenitora.
“Este se encontraba en alto grado de exaltación siendo inútil el intento de mediación. Por el contrario, en presencia de los uniformados atacó nuevamente a la madre, por tal motivo se le explicaron los derechos del aprehendido por el delito de violencia intrafamiliar”, añadieron.
El implicado quedó en manos del grupo de Protección a la Infancia y Adolescencia por el delito de agresión del Artículo 229 del código penal por violencia intrafamiliar.
“El que maltrate física o psicológicamente a cualquier miembro de su núcleo familiar incurrirá, siempre que la conducta no constituya delito sancionado con pena mayor, en prisión de cuatro (4) a ocho (8) años”, dice el determinante.
