La tragedia para dos familias ‘bumanguesas’ comenzó cuando un bus de servicio intermunicipal, de doble piso, arrastró los cables de energía cerca de la Terminal de Transportes de Bucaramanga, afectado el suministro de luz en el tramo vial entre La Salle y el puente El Bueno. El sector quedó en penumbra y solo las farolas de los vehículos iluminaban el camino.
Antes de la medianoche, Édgar Daniel Patiño Delgado transitaba en su motocicleta, una Pulsar 180 de placa PHN 75D. En los semáforos de acceso al barrio San Luis, sentido Bucaramanga a Girón, la oscuridad no le permitió ver el momento en que una persona cruzaba la vía y la atropelló.
El fuerte golpe le causó la muerte de manera instantánea al motociclista, pese al intento de los paramédicos por reanimarlo, sus signos vitales no retornaron y quedó tendido sobre el pavimento.
Pero la otra víctima fatal fue el peatón. Alexánder Guecha Cortés, quien el próximo 12 de diciembre alcanzaría los 41 años de edad. Quizá había iniciado las celebraciones semanas antes de su cumpleaños porque según los vecinos estaba tomando desde muy temprano. Fue llevado a un centro médico, pero falleció en el trayecto.
“Él vivía cerca del lugar del accidente. La verdad con esa oscuridad nadie lo habría visto. La moto iba en exceso de velocidad y me atrevería a pensar que el conductor nunca supo con qué se estrelló”, relataron los vecinos.
La Dirección de Tránsito de Bucaramanga informó que se manejan como hipótesis el exceso de velocidad del motociclista y cruzar la vía en estado de embriaguez por parte del peatón.